4 MIN. DE LECTURA

Actualidad Entender la política La corrupción no es normal Somos todas Identidades Guatemala urbana Guatemala rural De dónde venimos Blogs Ideas y soluciones
11 Pasos

Falso feminismo virtual

La revolución feminista que se ha levantado en las redes sociales es magnífica, maravillosa, extasiante. Todas y todos nos hemos convertido en una especie de grupo de apoyo que se hecha porras todos los días. Frase motivacional por aquí, videíto crudo por allá e invitación a evento (al que casi nadie va) de tanto en tanto.

Cotidianidad Opinión P369
Esta es una opinión

Lo triste es que no sea más que eso, un movimiento que se levantó en las redes sociales. Habrá quien diga que la situación ha cambiado, pero lo cierto es que solo nos envalentonamos a través del monitor. Sí bien pareciera que la información llega a todos por todos lados, en realidad se queda estancada en esa realidad tan bonita que recreamos y alimentamos todos los días: la realidad virtual.

Ojo. Hablo por mí y lo que veo a diario en mis redes sociales.

Lo cierto es que, a pesar de la amplia difusión en internet de ideas feministas, a mí no me tratan distinto, no me ven distinto. Existe una diferencia entre oír y escuchar: oír consiste únicamente en percibir el sonido a través de tus oídos; y escuchar es poner atención con tus otros sentidos y así realmente entender lo que estás oyendo. A mí no me escuchan cuando expreso mis ideas y pensamientos, solo me siguen oyendo. Los “piropos” callejeros no han cesado, en Facebook, los posts misóginos son frecuentes y las críticas al feminismo las hace a diestra y siniestra el que no tiene la mínima idea de lo que está hablando –y lo peor es que son alabados.

Escucho a las que se autodenominan feministas quejándose porque su novio no tenía dinero para comprarles un antojo cuándo ellas trabajan y devengan un sueldo con el cual no solo les alcanzaría para invitarlo al antojo, sino también para una cena cinco estrellas.

Veo a las que se presumen más empoderadas atribuyendo el éxito de la otra a qué “seguro se acostó con el gerente” o “tiene cuello”; es inexistente la posibilidad de que haya obtenido un logro por su inteligencia o esfuerzo. Incluso, me encuentro a mí misma juzgando la apariencia de otra porque está muy desaliñada para hacer esto o muy arreglada para hacer lo otro.

El movimiento feminista que existe en Guatemala es un movimiento joven, doy mi opinión basándome en como mi generación actúa y habla al respecto. No solo mis conocidos, sino mi entorno en general. Basta con observar un poco a mujeres y hombres entre los 17 y 30 y analizar si sus acciones hablan por sus ideologías.

Que hablemos más de lo que actuamos no es un vicio humano que se me ocurrió ayer; sin embargo, es necesario que todos estemos conscientes. Podríamos escribir libros enteros de cómo algunas mujeres podemos ser extremadamente machistas entre nosotras, incluso, más que los hombres.

Esto no cabe en mi cabeza, y no tendría que caber en la de ninguna, ¿cómo es que seguimos perpetuando algo que nos oprime tanto, algo qué nos obliga a ser, hacer y sentir lo que no somos y no queremos ser y conlleva a tanta infelicidad?

Lo podríamos atribuir a que, desde antes de nacer, antes de que hayamos abierto los ojos y visto la luz, ya nos habían condenado a un mundo de colores pastel, princesas, fragilidad, docilidad y obediencia. Desde el vientre de nuestra santa madre empieza realmente la diferenciación con un "¡es niña!" Y ya nos fuimos al carajo (un carajo rosado, claro).

Es como si los mecanismos ancestrales de patriarcado se activaran en los cerebros de todos e inmediatamente se crea una imagen de cómo se relacionará la niña con su cultura, con la vida, con el mundo en general. No hará falta el kit de trastecitos, la plancha y la muñeca para aleccionarnos y adiestrarnos como esposas y madres abnegadas; que siempre serán mejores alternativas que ser "putas" o "solteronas".

Y, como dije líneas atrás, podríamos atribuirlo a esto. Pero no. Así como a lo largo de los años vamos adquiriendo conceptos propios sobre religión o política, podemos deconstruir estos conceptos y crear nuevos y llevarlos a la práctica.

Creencias, filosofías e ideas que nos liberen, que nos saquen del canasto, que nos den una personalidad propia y que nos den el valor suficiente para enfrentarnos a la sociedad con las uñas y dientes todos los días y no solo a través de Facebook. Las grandes feministas de la historia han trascendido sin necesidad de postearlo en Instagram.

Virginia Woolf, una de los grandes íconos de literatura feminista, escribió Una habitación Propia en 1929. Hoy en día seguimos citando extractos del libro como credos en búsqueda de igualdad. Y por supuestos que fue porque no existían las redes en ese momento, pero a lo que voy es que la mayoría de las feministas experimentaron y actuaron en pro del movimiento a sangre viva. Movieron masas, manifestaron, gritaron, salieron a las calles y así lograron cambios. La atribución de Virginia fue pasiva y aunque hubiese sido una magnífica tuitera, no la recordarían por eso, sino por sus obras literarias.

Es magnífico que tengamos herramientas como las redes sociales, teclear algo en 140 caracteres que podría llegar a miles de millones y pueda crear conciencia al menos en una persona es uno de los triunfos de nuestra era. Sin embargo, lo más importante es que no se quede allí, que salga de la red y se vuelva nuestra experiencia de vida.

El conocimiento es poder. Quien conoce puede decidir y transformar. Decidamos vivir este movimiento que nos empodera, y aunque suene utópico, es capaz de romper las estructuras que nos aterrorizan y nos impiden hablar, pensar y actuar por no querer ser juzgadas y por querer ser siempre aceptadas.

En fin, quiero hacer hincapié en qué, más allá de proyectar una moderna y liberadora forma de pensar, promovamos en carne y hueso otras formas de ser. Esta es la única forma que tenemos para conquistar la libertad y equidad real que anhelamos.

Eduquémonos y eduquemos al mundo a través de nuestros actos siendo mujeres libres y sanas, usando nuestra energía para transformar pensamientos y no solo para publicarlo en Facebook.

Yiyi Sosa
/

Ingeniosa y necia, la segunda más que la primera y también viceversa. Apasionada por la literatura latinoamericana, escribo porque tengo muchas penas que repartir y alegrías que multiplicar. YouTuber y cuentacuentos cibernética.


Hay Mucho Más

15

COMENTARIOS

RESPUESTAS

    Luis Lewis /

    31/08/2016 9:07 AM

    Censura de nuevo?

    Martín - como cree usted que Hivos y Open Society Foundation van a tomar la manera en que se me ha censurado múltiples veces?

    Si ellos le dan financiamiento, no le parece que como mínimo se apegue al espíritu de 'openness' bajo el cual lo recibe y estas fundaciones existen?

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

      Luis Lewis /

      01/09/2016 4:45 PM

      A mi me borraron 2 en este articulo y ya me han borrado varios en otros... Indigna completamente y aun no lo logro entender el por que - o cual es el 'estandar' en Guatemala o en nomaga.gt para comentar... En EEUU nunca me borran nada siendo la diferencia que aqui comento en ingles al NYTimes o en otros foros...

      Lamentable porque se aprende mucho de los comentarios y distintos perspectivas y opiniones.

      ¡Ay no!

      ¡Nítido!

      El Gnomo /

      01/09/2016 1:51 PM

      A mí también me censuraron. Borraron mi comentario dos veces. Nunca habían hecho eso.

      ¡Ay no!

      ¡Nítido!

    D. Mazariegos. /

    30/08/2016 2:52 PM

    ¿Porque llamar Feminismo o Machismo a la búsqueda de Igualdad?

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Marjorie /

    29/08/2016 11:39 AM

    No podemos hablar de feminismo y atacar a otras mujeres. Nuestra forma de vida, la forma de asimilar la educación, determinará el grado de empoderamiento que tenemos.

    Es y ha sido un recorrido difícil y falta todavía mucho. Estimo que desde este espacio se podría construir más, hablar de sororidad y ayudar a otras mujeres a empoderarse, a seguir con los estigmas de la cultura patriarcal de culpar siempre a la mujer.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Alejandro Palmieri /

    27/08/2016 7:19 AM

    "...hecha porras..."? Si es doble sentido -coloquial- me resulta genial! Si es un error, es garrafal!

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    P. Choy /

    26/08/2016 10:11 PM

    Goma super blanda y vamos a ganar van a ver

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

    P. Choy /

    26/08/2016 10:03 PM

    Somos 5 comentarios y como 7 fuera, obvio Femininazis

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

    P. Choy /

    26/08/2016 9:36 PM

    Vuelve la fórmula 1, spa francochamps, vamos volvamos al masculinismo porque nos quisieron castrar, somos hombres y masculinos porque nos debemos dejar a las tonteras somos hombres competitivos que no nos quiten vuestros carros de competencia.....


    Somos masculinos que no nos Maten con eso, vamos adelante......

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

    Elizabeth Rojas /

    26/08/2016 8:03 PM

    Si hay un movimiento que ha logrado cambios en la forma de pensar y obrar de muchas personas, hombres y mujeres ha sido el feminismo.

    Asumo que la autora no se cconsidera feminista,ya que se refiere a quienes nos denominamos así.
    Es lo lindo del feminismo, beneficia hasta a quienes no se sienten parte de él:
    Le permite a ella tener una columna, algo impensable décadas atrás.

    ¡Ay no!

    3

    ¡Nítido!

    Ixmucané Solórzano /

    26/08/2016 6:25 PM

    Menos mal que aclara que habla por usted y por lo que ve a diario en sus redes sociales, porque esa manera de generalizar, se puede confundir con desacreditación de un movimiento social que se ha caracterizado por su criticidad y capacidad de respuesta clara, puntual cuando se ha requerido.

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

      P. Choy /

      26/08/2016 9:41 PM

      Somos hombres o que?

      ¡Ay no!

      ¡Nítido!

    Luis Lewis /

    30/08/2016 7:29 PM

    Aqui parte del poema - reglas X y XI:

    X
    El amor de mi hombre
    no le huirá a las cocinas
    ni a los pañales del hijo,
    será como un viento fresco
    llevándose entre nubes de sueño y de pasado
    las debilidades que, por siglos, nos mantuvieron
    separados
    como seres de distinta estatura
    XI
    El amor de mi hombre
    no querrá rotularme o etiquetarme,
    me dará aire, espacio,
    alimento para crecer y ser mejor,
    como una Revolución
    que hace de cada día
    el comienzo de una nueva victoria.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Luis Lewis /

    29/08/2016 4:57 PM

    "Virginia Woolf, una de los grandes íconos de literatura feminista, escribió Una habitación Propia en 1929. Hoy en día seguimos citando extractos del libro como credos en búsqueda de igualdad."

    Segun parece censoraron mi comentario que contenia mi traduccion de la nota de suicidio de Virginia Woolf a su esposo, la cual tambien se apreciaba la devocion y amor mutuo que ellos cultivaron...

    Por que censorar estos detalles?

    Lo unico que puedo pensar es que no se adecuo a la agenda que nomada/articulo/escritor quiere impulsar. Lamentable.

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!

    Luis Lewis /

    27/08/2016 1:28 PM

    Traducciones al espa~nol son mias - puede que cualquier traduccion que ya exista sea un poco diferente en su estructura...

    ¡Ay no!

    1

    ¡Nítido!



Secciones