La historia de un Champion

El Champion es conocido por casi todos los alumnos y ex-alumnos de los colegios ubicados en el Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala. Por más de tres décadas ha llevado al paladar de los guatemaltecos 38 clases de granizadas, con calidad, excelente presentación e irresistibles sabores. Cada año agrega una receta nueva a su menú, utilizando una amplia variedad de ingredientes naturales para lograr combinaciones características de la gastronomía popular guatemalteca.

¿Por qué se le conoce como ‘Champion’? Porque hace 32 años se dedicó a competir profesionalmente en fisicoculturismo, logrando varios primeros lugares hasta que se convirtió en Campeón Absoluto. Años después, quienes disfrutaban las granizadas que Gerardo elaboraba, lo reconocieron por la publicación donde figuraba en la portada de un medio escrito.

Durante varios años, el Champion practicaba deporte los días hábiles de la semana, y los domingos ubicaba su carretilla de granizadas en el Hipódromo del Norte, donde se hizo famoso haciendo raspados de hielo. Ahora, la empresa de la familia Rivera cuenta con una flotilla de diez carretillas diseñadas y fabricadas por él, pues también se dedica a la carpintería. Casi todos sus familiares están involucrados en “el negocio más refrescante” de la Ciudad de Guatemala, y su principal aliado es el hielo.

En este foto-reportaje sigo de cerca la cotidianidad de Gerardo Rivera –el emblemático Champion–, desde la compra de los ingredientes necesarios, hasta el momento en que los visitantes del Centro degustan sus múltiples creaciones a base de raspado de hielo. Si usted se encuentra con las peculiares carretillas de color lila y blanco, seguramente disfrutará una granizada refrescante para soportar el calor de la época.