Con Bourdain aprendí a cocinar, viajar y vivir

El viernes parecía un día más. Amanecí como cualquier otro, me preparé una taza de café y tome mi celular. Con un mensaje de Business Insider mi mañana tomó una avenida con más reflexión de lo normal. Me quedé perdida en mis propios pensamientos al leer: Anthony Bourdain es hallado muerto a los 61 años.

Uno de esos lideres de cocina, viajes y aventuras. Aquel que siempre recordaré por su dicho “Tu cuerpo no es un templo, es un parque de diversiones. Disfruta el viaje” , una frase que me ha inspirado por muchos años y que trato de tener en mente cada vez que se me presenta una nueva experiencia.

Bourdain me inspiró a viajar y probar, adentrarme en nuevas culturas y experiencias gastronómicas dejando de lado el escepticismo que rodea diferentes cocinas. Él, que siempre probó de todo, mientras más raro mejor. El que protagonizara una de las fotos más famosas de Barak Obama cuando era presidente y comieron en un pequeño comedor en Hanoi, Vietnam, sentados en bancos de plástico y disfrutando una cerveza directo de la botella. Al que nombramos como la razón por la cual somos menos temerosos a lo desconocido, se había quitado la vida.

Esta fotografía de Pete Souza fue publicada en la cuenta de Twitter el entonces presidente Barak Obama.

Recuerdo mis primeros años en la industria de gastronomía, rodeada de nuevas experiencias donde cada día que se aprendía algo quedaba más claro lo mucho que quedaba por aprender. Cuando buscaba inspiración y conocimiento, me topé por primera vez con este chef que tuvo la fortuna de empezar su vida en una de las mejores ciudades gastronómicas de Estados Unidos, Nueva York, y que no tenía miedo de verse (en sus palabras) como un idiota, pero aprovechaba la oportunidad para educar un poco a los televidentes con cada experiencia compartida. Él fue mi compañía y lo seguirá siendo.

En más de alguna ocasión nos sentamos con mis compañeros a ver su programa Parts unknown y sonábamos con conocer y viajar como él lo hacía. Recuerdo la primera vez que leí su libro No reservations. Fue un gran chef, escritor y un gran mentor que nos permitió a todos acompañarle mientras nos inspiraba.

Quien diría que este hombre con una risa fácil y una vida inspiradora llevaba una batalla tan fuerte por dentro, una que terminó perdiendo.

El suicidio tiene estadísticas que nos dejan boquiabiertos, y fue justo en uno de los artículos escritos a este gran chef que me di cuenta que es más común en hombres que mujeres, de cada 10 suicidios siete son hombres. Me parece anonadante que la depresión, enfermedad de la que no hablamos, sea la causa de tantas muertes. ¿Como es posible que siga siendo ignorada? Una muerte nos duele a todos, pero una en la que pudimos hacer una diferencia nos duele más. Les invito este fin de semana a compartir en familia, con amigos. Con aquella persona con la que tal vez tenemos semanas de no hablarle, pero que pensamos tal vez lo necesita. Seamos mejores humanos, compartamos un poco de amor, disfrutemos de un buen platillo y tratemos de escuchar un poco más a los que nos rodea. Quien quita y hacemos la diferencia en la vida de alguien, aunque sea por un momento.

Los dejo con otra frase: “Si tuviera que defender cualquier cosa,  sería el movimiento. Hasta donde puedas, tanto como puedas. Al otro lado del océano o simplemente del otro lado del río. Ponerse en la piel de otra persona o al menos comer su comida, es una ventaja para todos“. Buen provecho.