El 7 de septiembre del 2018, la actriz y cantante colombiana Aída Bossa lanzó su nueva canción “Asína jué” (Así es) en lengua palenquera, y el sencillo ha sido recibido como un tributo a la cultura afrocolombiana. Pero, cuando personas ajenas a una comunidad hacen uso comercial del patrimonio oral y tradicional de una minoría lo que están haciendo es apropiación cultural.
Aída es una reconocida actriz cartagenera que lleva una larga trayectoria en la televisión nacional y es recordada por actuaciones como en la serie El Man Es Germán, donde hacía el papel de una santandereana “Paty”. Luego, la vimos en la novela Celia donde hacía el papel de Noris la hermana “blanquita de Celia Cruz” y hace un año aproximadamente la vimos en el papel protagónico de la miniserie La Niña Emilia, que contaba la vida de una de las más emblemáticas cantante afro en la historia de la música colombiana.
He coincidido con Aída en varias ocasiones y me parece una mujer muy talentosa y carismática, tenemos amigos en común y mi interés por empezar este análisis surgió debido a que ella misma me escribió días antes de su lanzamiento pidiéndome que la apoyara con un video diciendo unas palabras en lengua palenquera y motivara a la gente en redes sociales a seguir su nuevo proyecto. A lo anterior me negué explicando lo delicada que es la apropiación cultural, pero Aída defendió su iniciativa alegando el amor por esta cultura y que su abuela era una mujer afrodescendiente. Por eso quiero aclarar que esta crítica no es personal, Bossa no es la primera ni la última artista que comete estos errores de apropiación cultural, y quiero mostrarlo y señalarlo porque aún no hemos entendido cómo afecta a las minorías la apropiación cultural.
¿Qué es la apropiación cultural?
El término apropiación cultural es bastante controversial debido a que las fronteras entre el intercambio cultural, la asimilación cultural, la apreciación cultural y la apropiación cultural pueden llegar a ser muy difusas. En los últimos 25 años, académicos, autores, grupos étnicos y activistas han trabajado mucho el concepto de apropiación cultural. El profesor, escritor y músico afroamericano Greg Tate en su libro Everything But the Burden: What White People Are Taking from Black Culture (Todo menos la carga: lo que la gente blanca está tomando de la cultura negra) habla sobre el fenómeno de la apropiación cultural colocando entre muchos ejemplos el hecho de que el ganador del Grammy a mejor rapero en el 2001 “fuera más blanco que el arroz”: Eminem.
Según la activista Loretta Todd, quien hace parte de los pueblos originarios de Canadá, “la apropiación ocurre cuando alguien más habla, dice, define, describe, representa, usa o recluta las imágenes, historias, experiencias, sueños de otros para sí mismos”. Hasta ahí todo claro, sin embargo hay corrientes de pensamiento que encuentran muchas cosas positivas en los mestizajes. Pero cuando hay una relación desigual de poder de por medio, la cosa se complica.
A grandes rasgos la apropiación cultural se da cuando un grupo privilegiado toma elementos o manifestaciones culturales de un grupo minoritario (casi siempre oprimido) y los usa temporalmente por moda, exotismo o con fines lucrativos sin tener nada que ver con la cultura de origen. Lo violento de la apropiación cultural es que la persona que incurre en la apropiación, además de no participar en la creación individual o colectiva de la manifestación, por lo general la distorsiona y la despoja del significado o del contexto original. Además ese grupo privilegiado que se apropia, casi siempre tiene una historia pasada o presente de opresión y dominación hacia la cultura minoritaria u oprimida que imita. Es decir esta persona o grupo de personas que “se apropian” nunca han sufrido la discriminación, el estigmas, ni la opresión que vive históricamente ese grupo de personas precisamente por hacer uso de esas mismas manifestaciones culturales que le son propias.
Una de las cosas más violentas de la apropiación cultural, es que los elementos que son tomados de la otra cultura, la sociedad las celebra, las ve lindas y las encuentra valiosas en el cuerpo privilegiado (blanco-mestizo) pero la misma manifestación en el cuerpo racializado es motivo de discriminación. En este caso, para poner un ejemplo, la gran mayoría de los palenqueros no hablan lengua palenquera porque sus padres fueron fuertemente discriminados por los pueblos vecinos y por los cartageneros que se burlaban diciendo que los palenqueros nunca aprendieron a hablar español; cuando en realidad hablan una lengua de origen bantú articulada con el castellano, y por ese motivo no querían enseñarles a sus hijos la lengua, para protegerlos de la discriminación.
Por esas mismas políticas de representación que tanto defiendo y respeto, ya que para mi son tan importantes los lugares de enunciación, decidí entrevistar a Keila Miranda, Conocida como “Kr”, la voz femenina de la agrupación Kombilesa Mí, una mujer Palenquera que vive en el día a día la militancia, la resistencia y el activismo para preservar y reivindicar la lengua palenquera a través de la música.
Keila cuéntame un poco sobre los inicios de Kombilesa Mí
KR/ Kombilesa Mí surgió hace siete años un 20 de julio, gracias a la unión de varios grupos musicales de Palenque, y durante todo este proceso de formación hemos crecido como artistas y como agrupación, hemos luchado por espacios que históricamente han sido negados para las voces palenqueras y gracias a nuestro trabajo y a nuestros esfuerzos hemos convertido a Kombilesa Mí es una agrupación reconocida a nivel nacional e internacional, y vamos por más, porque queremos que el trabajo de Kombilesa Mí se escuche en todo el mundo.
¿Cómo empezó el proceso de activismo y de hacer visible la lengua palenquera a través de la música?
KR/ Fue una lucha que asumió Afroneto para escribir en lengua palenquera, fue muy difícil porque los integrantes tenían más interés en aprender a cantar en inglés que en aprender la lengua palenquera, porque además de la discriminación histórica también soñábamos con cantar en Estados Unidos. Afroneto poco a poco los convenció de lo valioso que era cantar en lengua palenquera y que no podían pretender competir con una industria tan grande y con gente con tanta trayectoria con un producto igual, repetía todo el tiempo que la lengua palenquera era nuestro patrimonio y lo que nos hacía únicos ante el mundo, ahora la lengua palenquera se ha convertido en nuestra marca personal como agrupación musical.
En principio dentro de la misma comunidad nos decían que estábamos locos, algunos maestros musicales nos pedían no olvidar lo propio por lo ajeno, no creían en esa fusión de folklore tradicional, rap y lengua palenquera, pero poco a poco se fueron dando las cosas y así nació el RFP “Rap Folklórico Palenkero”.
¿El objetivo era mostrarle la lengua palenquera al mundo?
KR/ Claro, pero más que al mundo el objetivo era que nuestra comunidad se reconciliara con la lengua palenquera, nuestros padres y nuestros abuelos sufrieron mucha discriminación por la lengua, ellos querían una vida mejor para sus hijos y por eso se esforzaron por hacernos hablar bien español y que nos olvidaramos de la lengua palenquera, pero gracias a muchos procesos incluyendo el de Kombilesa Mí, empezamos a trabajar con los niñas y jóvenes de nuestra comunidad, y les encanta la lengua palenquera, al principio se sabían las letras de nuestras canciones pero no sabían lo que significaban. Luego les fuimos enséñalos el significado. La música ha sido un instrumento muy importante para que la aprenda, queremos que la gente en el mundo valore nuestra lengua, pero más importante aún que nuestro pueblo la valore, la hable y la respete.
Desde el cuerpo de una mujer palenquera, ¿qué tan difícil ha sido dentro y fuera de la comunidad ganarse un espacio para cantar?
KR/ Ay Sher, no te imaginas. Mi comunidad es muy conservadora, yo empecé en la música con unos procesos sociales y desde niña aprendí a tocar algunos instrumentos, cuando se forma Kombilesa Mí yo fuí entrando poco a poco luchando, tocaba las maracas y otros instrumentos de percusión, después empecé a cantar y ellos se dieron cuentan que lo hacía bien, entonces corría de los instrumentos a los coros y cuando se acababan los coros volvía a los instrumentos, todo al tiempo. Luego la gente empezó a ver mi talento y mis ganas, y el director accedió a darme la oportunidad de ser la voz principal femenina, entonces empecé a tener la voz principal femenina en Kombilesa Mí. Fuera de Palenque, no es menos difícil, todavía hay mucho racismo y todavía no se nos permite cantar en ciertos espacios, y a mí por ser mujer y palenquera me toca luchar como cinco veces más. El problema de la gente con nuestra músicas en lengua palenquera, es que sólo cuando se quieren mostrar “diversos” o cuando es un día como el día de la afrocolombianidad, es que todo el mundo nos quiere contratar o invitar, fuera de las dos o tres fechas culturales, tocamos puertas y no pasa nada. Y esta música es para disfrutarla todos los días, en cualquier momento como las demás.
¿Con Aída qué tipo de relación tienes?
KR/ Yo a ella no la conozco, nunca he hablado con ella. Sé que se acercó a Afroneto, mi esposo, para que le ayudara con la traducción de unas palabras en lengua palenquera, a mi eso no me dió buena espina, pero no quise discutirlo porque eso se presta para malos entendidos. Pero ahora él está sorprendido, me dice que él nunca se imaginó que Aída iba hacer todo eso y que nos iba a excluir de esa manera. Lo que pasa Sher es que a Palenque llega mucha gente buscando hacer “amigos” para sacar investigaciones, hacer proyectos y uno muchas veces por falta de conocimiento o creyendo que la gente tiene buena fé con uno, uno cede demasiado y al final pasa lo mismo de siempre, hacen plata a costillas del capital cultural de Palenque y lo dejan a uno viendo un chispero. Los palenqueros tenemos que despertarnos, esto no puede seguir pasando, esto también lo hicieron con nuestros abuelos, la gente venía y les sacaba información hicieron plata con eso y ahí están nuestros abuelos invisibles y viviendo en condiciones precarias y otros dándose la gran vida y eso no es justo.
¿Cómo te sentiste cuando viste y escuchaste una canción en lengua palenquera en una serie como la Niña Emilia?
KR/ Imagínate que nos dimos cuenta porque la gente nos llamaba a felicitarnos porque veían los comerciales, y como esa canción dice I kelé… Asína jue, Kombilesa Mí y esas frases tienen recordación es por nuestra música, la gente creía que éramos nosotros, que estábamos trabajando ahí, o que íbamos a salir en la serie.
¿Por qué crees que no los incluyeron en la serie para cantar si ustedes llevan esta trayectoria y ustedes son los que viven, gozan y sufren esa lengua?
KR/ Qué te puedo decir Sher, yo no estoy diciendo que nadie puede hablar o cantar en lengua palenquera, pero uno debe respetar los procesos y el trabajo de los demás, lo mínimo que Aída podía hacer si tenía tantas buenas intenciones como dice, era trabajar en colaboración con nosotros o si no quería nada con Kombilesa Mí, en Palenque lo que hay son cantadoras y mujeres talentosas a las que podía incluir en ambas producciones, eso sí hubiese sido un intercambio cultural o un acercamiento honesto con la lengua palenquera para la gente que la sigue.
¿Cómo te sientes con la iniciativa de Aída y su canción en lengua palenquera, con ese contenido en redes invitando a la gente la gente a hacerse videos cantando en lengua palenquera?
KR/ Yo siento que ella se está aprovechando del trabajo que nosotros ya hemos adelantado con tanto esfuerzo en la reivindicación de la lengua palenquera, y de la recordación que ya tiene Kombilesa Mí, ahora como ella es más reconocida en medios nacionales y como ella no es negra todo el mundo la verá como la “salvadora” de la lengua palenquera y llegará un momento en el que la gente asocie todo nuestro trabajo es con ella, y que se coloque en Google “Kombilesa Mí” y salga más información sobre ella y su canción que de todo el trabajo que hemos venido haciendo nosotros durante siete años.
Precisamente hace unos días estábamos en Chicago haciendo una presentación, y una señora estaba con su niña y la subió a la tarima para que bailara conmigo, la señora gritaba unas palabra en lengua palenquera no muy bien pronunciadas, y luego de la presentación llegó al camerino a pedirnos un video cantando con la niña la canción de Aída. Yo sabía por dónde iba todo y me imaginé que esa señora era amiga de Aída, y les dije que tenía que ir al baño, y no volví más, pero al resto de la agrupación le tocó complacer a la niña ¿Cómo hace uno en una situación así? ¿Qué puede hacer o decirle uno a una niña que llega pedirnos eso? El resto de la agrupación lo hizo, y tal como me lo imaginaba, el video terminó en las redes de Aída y de esa manera ella le hace creer a todos que tiene una relación maravillosa con Kombilesa Mí, cuando en realidad todo el tiempo uno se siente presionado con lo que ella hace y su pretendida “amabilidad”.
¿Crees que Aída está haciendo apropiación cultural cantando en lengua palenquera sin incluir artistas palenqueros en el proceso?
KR/ Yo creo que ella sí está haciendo apropiación cultural, porque ella no es palenquera, no ha vivido la discriminación y la exotización que nosotros hemos tenido que soportar por tantos siglos, y Aída se está tomando además una reivindicación que no le pertenece y que no conoce, porque si ella vino para que Afroneto le hiciera una traducción de unas palabras en lengua palenquera, quiere decir que ella está enseñado en redes una lengua que no conoce y que ni sabe hablar.
¿Cuáles crees que son las consecuencias negativas que puede tener, que gente que no hace parte de la comunidad use la lengua para producciones, sin gente palenquera y con fines comerciales?
KR/ La lengua palenquera tiene su historia, fue creada para proteger a los palenqueros de los extraños y de los peligros, si yo quiero hablar con mi mamá de algo delicado y no quiero que una persona ajena a mi comunidad se entere hablamos en lengua palenquera. Nuestra lengua no es una moda, yo no hago música en lengua palenquera para sacarle plata a eso, yo casi todo el trabajo social que hago en mi pueblo con las niñas y jóvenes, lo hago con mis propios recursos, por supuesto que trabajo como artista con la lengua palenquera, pero mi relación con esta lengua va más allá de la fama, de un tema económico o de las reproducciones en plataformas digitales que me puedan generar un ingreso. Lo malo de todo esto puede ser la distorsión, y que se usa nuestra lengua pero excluye a nuestra gente.
¿Qué similitudes crees que hay entre la canción de Kombilesa Mí “I kelé“ de tu autoría y la canción Asína jué de Aída Bossa?
KR/ Qué te digo, yo creo que ella estudió mucho la música de Kombilesa Mí para hacer su canción, solo mira el video de Asína jué y el de I kelé, la canción de Aída es la versión blanca de I kelé con menos contenido de letra. Yo en esa canción termino cantando sola Ikeleeeee Ikeleeee Ikeleeee… Ella comienza la canción igual pero con un ritmo diferente.
Vídeo de la canción I Kelé de Kombilesa Mí
Vídeo de la canción Asiná Jué de Aída Bossa
¿Qué se viene para Kombilesa Mi?
KR/ Ya tenemos cierto reconocimiento en Colombia, ya nos están copiando (entre risas) eso quiere decir que estamos haciendo las cosas bien. Hace pocos días llegamos de la gira por Estados Unidos, cumplimos ese sueño, fueron 22 días en Estados Unidos, cinco ciudades: Texas, New York, Boston, Washington y Chicago. Tuvimos ocho presentaciones sin mencionar los talleres de Lengua palenquera, Música y Danza tradicionales de Palenque. Este fin de año Kombilesa mí realizará el lanzamiento de una canción y el vídeo clip los peinados, en diciembre es el lanzamiento de nuestro segundo disco "ESA PALENQUERA" vienen cosas grandes, tenemos muchas ganas y mucha música para compartir con Palenque y con el mundo, así que vamos pa’lante. Pueden seguir nuestro trabajo, ver las agendas, las fotos y videos en el Instagram de @Kombilesami o en el mio @kr_kombilesa.
Keila, muchas gracias por esta entrevista y muchos éxitos en su gira, se merecen todo lo bueno del mundo. Espero que con este artículo podamos generar conciencia acerca de los lugares de enunciación, la importancia de la representación y lo delicado que es caer en la apropiación cultural.
Hagamos todo lo posible para que nuestro gusto por una cultura no termine siendo algo tóxico que borra procesos y personas que viven una lucha. Importante respetar estos procesos y dejar a un lado la creencia de que en Colombia y Latinoamérica en general no es posible hacer apropiación cultural bajo la premisa de que todos somos mestizos y todos tenemos un poco de todo, porque la realidad es que existen unas relaciones de poder que son históricas y que hacemos más fuertes si no aprendemos a relacionarnos sanamente con las comunidades culturales de nuestra región.
Sher /
Creo que es importante hablar de esto.
Oriana /
Claro que si es importante, porque minimizar el trabajo de las victimas del racismo o de cualquier otro tipo de violencia es revictimizar, además resulta triste y molesto ver cómo aún en esta época la gente siga en su afán de colonizar pretendiendo hacer invisible el proceso cultural, intelectual y patrimonial que llevan los nativos, en este caso los palenqueros y palenqueras.
NEFRIX /
Sher gracias por abordar este tema.
La discusión hay que abrirla, la apropiación cultural no debe naturalizarse, no está bien. Sobre todo cuando las comunidades oprimidas han sufrido históricamente discriminación por esos elementos que terceros desean volver moda solo con fines lucrativos.
Gracias por compartirlo!
María José G. /
¡Muy interesante, oportuno y necesario de tratar! Éxitos a Kombilesa Mí.
Ritzy Medina Cuentas /
Hola Sher. Encantada de leerte.
A mí me cuestiona el hecho que toda relación de poder es una relación desigual, per se. Entonces el tema de la apropiación CULTURAL pasa por una relación de poder. Pero entonces qué no es una relación de poder? El debate está en que Aída debió decirle a Agroneto para qué iba a usar esa letra y llevar eso a una relación de derechos de autor.
Nadie, por más que respete una cultura, va a sentir lo que ésta cultura ha sentido históricamente sea cual sea las particularidades. Así que eso no me parece argumento para afirmar la no apropiación cultural.
Yo soy de Tolú, y mi relación con Palenque nace a los 8 años cuando conozco en mi casa a Manuela Valdez Cassiani, vendedora de dulces en mi pueblo. Ahí empezó un proceso de apropiación cultural que viene del sentí pensar. La apropiación perse no es negativa, es el modo como se apropia. Toda relación humana implica la apropiación de algo, así hemos complejizado nuestras relaciones sociales.
Ojalá sigamos dando este debate, desde todas las voces, más allá de blancos y negros, más allá de bueno y malo, hay que dejar las dicotomías y propender por la interculturalidad. Abrazo cósmico.
Sher /
Gracias por leerme, creo que tener conciencia de las relaciones históricas con Palenque debería cuestionar fuertemente a las personas a la hora de interactuar con la comunidad y también a la hora ir hacer proyectos y de hablar por ella siendo ajenos. Claramente es más que buenos y malos, pero no es causalidad la exclusión sistemática de las comunidades negras y palenqueras en todos los ámbitos sociales en Colombia.
Patricia /
Sher desde que te sigo he aprendido muchísimo. Referente a este artículo opino que abre la puerta a una discusión muy interesante y compleja ???
Sher /
Esa es la intención, gracias por leerme.