“Sorprende lo común que son los abusos sexuales a menores en Guatemala”, dice jugador de la NFL

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El jugador de la Liga Nacional de Fútbol Americano (en inglés NFL), Austin Carr, visitó Guatemala por el proyecto Team Freedom. Este es un grupo de jugadores profesionales de futbol americano y béisbol que usan su audiencia para luchar contra la violencia. En esta ocasión vino en apoyo de la Misión Internacional de Justicia ( en inglés IJM) para conocer sobre las niñas, niños y adolescentes víctimas de violencia sexual.

—Las estadísticas son abrumadoras, dijo el jugador.

Según el informe de la IJM la demanda mensual por justicia en delitos sexuales es mayor que la de delitos contra la vida. En 2018 se denunciaron 9 mil casos por de violencia sexual, sin embargo solo se ocurrieron 954 aprehensiones y 1 mil 200 sentencias. Se calcula que entre la denuncia y la sentencia hay un proceso de 780 días de por medio, es decir que para lograr una resolución se debe esperar más de dos años.

El reinado de la impunidad

Erica Carr, experta en historia y estudios internacionales, es esposa del jugador y lo acompañó su visita. Asegura que uno de los retos de la misión es conseguir que haya más denuncias en este delito, pues a su criterio, algunas víctimas tienen miedo de hablar sobre el tema con las autoridades. Según el IMJ cientos de niños son abusados sexualmente en el país pero estos no se pueden contabilizar en su totalidad pues existen pocas denuncias contra los agresores. La misión ha buscado desde 2005 acompañar al sistema de justicia para reducir este número. Entre las acciones está la coordinación institucional entre la Policía Nacional Civil, el Organismo Judicial y el Ministerio Público.

Entre los logros se pueden mencionar la actualización de fiscales a nivel nacional sobre el tema, encuentros regionales sobre violencia sexual y  la creación de un modelo de atención a niños, niñas y adolescentes víctimas de estos delitos.

Austin, Erica y representantes de Misión Internacional de Justicia en el INACIF.

Ausencia de educación sexual

En Guatemala 7 mil niñas de entre 10 y 15 años dieron a luz en 2018 según Observatorio de Salud Sexual y Reproductiva (Osar). Sobre este tema explica Érica Carr que la mayoría están en esta condición por violación de gente cercana a la menor. Explica que es un problema cíclico que necesita detenerse y para ello se debe implementar la educación sexual en las escuelas.

Esta materia ayudaría a  detectar  fácilmente a las menores cuando son víctimas de abuso sexual o violación. Para ello el IJM ha creado materiales para capacitar a los maestros en la correcta enseñanza del tema, pero también para saber cómo deben proceder los maestros en las denuncias de estos tipos de delitos.

La pareja visitó el pasado miércoles el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para conocer el proceso y apoyo que da este lugar a las víctimas. Además, hablaron  por más de una hora con víctimas que han denunciado el tema.

—No pensé que hubiesen tantos casos, aseguro el jugador y  añadió que le sorprende lo común que son los abusos sexuales a menores este país.

—Esperamos que algún día IJM pueda retirarse de Guatemala, dice Erica Carr, explica que cuando lo hagan será porque el sistema de justicia guatemalteca podrá proteger a los niños y reducir los niveles de impunidad en el país.