Sobre el papel, la acusación es un manual de ética.
Investigadores del MP y la CICIG tienen evidencias de necropsias, escenas del crimen y 43 testigos –policías, ciudadanos y sobrevivientes de torturas– que acusan a un grupo de élite de la administración de Carlos Vielmann Montes de llevar a cabo asesinatos y torturas en su ‘lucha contra la violencia’ desde el Ministerio de Gobernación entre 2004-2007.
Regresemos a 2005. Eran los tiempos del gobierno empresarial de Óscar Berger, quien había confiado la seguridad a Carlos Vielmann –expresidente de la Cámara de Industria, apodado por sus amistades como ‘el Chonte’ por su afición a las armas durante el conflicto armado interno–, y a Erwin Sperisen –un treintañero cuya experiencia en el tema se reducía a haber sido guardaespaldas y ahijado político del entonces alcalde Álvaro Arzú–.
La política de seguridad de Vielmann y Sperisen, a partir de investigaciones del MP y la CICIG, parece haber tenido un componente que reñía con la ley y la moral: asesinar a sospechosos de ser criminales y a criminales sin que un juez ordenara su sentencia de muerte. Por ser asesinatos cometido por agentes estales sin una orden de juez, a este tipo de crímenes se les considera ‘ejecuciones extrajudiciales’.
La acusación presentada ayer va así:
El 22 de octubre de 2005 se fugaron 19 reos de la cárcel de máxima seguridad El Infiernito, en Escuintla. Entre ellos estaba el jefe de la banda de secuestradores ‘Agosto Negro’, un tema muy sensible entre el sector empresarial, cuyas familias fueron víctimas de secuestros políticos durante la guerra y secuestros económicos después de la firma de la paz en 1996.
El Ministerio de Gobernación de Carlos Vielmann estableció el Plan Gavilán para encontrar a los fugados y pidió ayuda a la población, ofreciendo recompensas por llamadas que ayudaran a dar con el paradero de los prófugos.
El problema –según la acusación del MP y la CICIG– fue que se establecieron dos estructuras, una legal y una ilegal.
La estructura legal fue respaldada en el plan de acción interno 002-2005, compuesta por grupos policías (32) que tenían como misión ubicar a los fugados.
Y la estructura ilegal fue compuesta por 8 integrantes del grupo élite que respondían al asesor Víctor Rivera (qepd); a Víctor Soto, entonces jefe del DEIC de la PNC; a Erwin Sperisen, entonces director de la policía; y al entonces ministro Carlos Vielmann. La estructura ilegal tuvo como misión torturar y asesinar a los fugados que fueran recapturados por la estructura legal.
Esta estructura ilegal es considerada un clásico Cuerpo Ilegal y Aparato Clandestino de Seguridad (CIACS), típico en Guatemala desde tiempos de las dictaduras y origen para la creación de la CICIG, cuya misión es desmantelar este tipo de aparatos, que dejan en vulnerabilidad a toda la ciudadanía, pues no tienen contrapesos judiciales. Durante las dictaduras, estos CIACS eran llamados ‘Escuadrones de la muerte’.
Este ha sido el comportamiento de los homicidios en los centros de detención.
El año 2005 ha sido el peor, pero en los últimos años ha habido un incremento de este tipo de casos. pic.twitter.com/UaPyl5vcPO
— DiálogosGuate (@DialogosGuate) 30 de octubre de 2018
La asociación Diálogos presentó ayer un dato importante en defensa de la vida de los reos. 2005 fue el año más letal, con 36 asesinatos de privados de libertad, que llevan a una tasa de 500 asesinatos por cada 100 mil habitantes.
Tendencia de largo plazo (refleja lo que pasa en los últimos 12 meses) de la #ViolenciaHomicidaGT al 31 de julio del 2018 según registros de @PNCdeGuatemala No obstante, julio 2018 ha sido el peor mes (373 homicidios) desde octubre 2017 (393 homicidios) pic.twitter.com/FpkhARol8E
— DiálogosGuate (@DialogosGuate) 17 de agosto de 2018
Hay otro dato importante. Este hecho –el asesinato de reos– no mejoró las condiciones de seguridad afuera de las cárceles. El año 2006 fue uno de los más violentos de la historia democrática de Guatemala, con 46 asesinatos por cada 100 mil habitantes. De hecho, desde que empezó la CICIG en 2008 y Gobernación empezó a abandonar las prácticas de limpieza social, la violencia se redujo a la mitad en Guatemala.
El MP y la CICIG consideran que durante la gestión de Vielmann operaba una estructura paralela dedicada a cometer crímenes. Entre estos crímenes están estos 7 por los que los acusan en 2018, pero estuvieron también por los que los acusaron en 2010 del caso Pavón y están los del caso Parlacén.
La célula acusada ayer está conformada por Francisco Guarcas, Víctor Ramos y Axel Martínez (condenados por el caso Zacapa), Víctor Ruiz, Kamilo Rivera y Stu Velasco.
Ayer la CICIG y el MP recordaron que otra célula era la de Luis Arturo Herrera López, José Adolfo Gutiérrez Marvin, Marvín Langen Escobar Méndez y José Korki López Arreaga. Ellos cuatro fueron capturados en 2007 al ser grabados por una cámara de seguridad mientras compraban la gasolina con la que fueron quemados los tres diputados del Parlamento Centroamericano. Cuando fueron capturados, dijeron que acusarían a sus jefes (de esta estructura). Un día después fueron asesinados por otro escuadrón en la cárcel de máxima seguridad. Estos crímenes de los diputados del Parlacén y de los cuatro policías fueron los que provocaron la salida de Vielmann como ministro y provocaron la indignación nacional que forzó al Congreso para aprobar la CICIG en septiembre de 2007.
¿Vielmann y Sperisen no habían sido juzgado y absuelto por este caso?
El caso actual de 2018, llamado Ejecuciones Extrajudiciales y Tortura, se parece mucho al caso Pavón de 2010, cuando el MP y la CICIG acusaron a Vielmann, a Sperisen y a Víctor Soto de haber dirigido una estructura paralela que asesinó a 7 reos en Pavón y a 3 prófugos de El Infiernito.
El MP y la CICIG intentaron acusar a Vielmann en Guatemala por ese caso, pero el exministro hizo uso de su nacionalidad española para pedir que lo juzgaran en Madrid. El MP y la CICIG colaboraron con la fiscalía española durante la acusación.
Por ese caso, Víctor Soto fue condenado en Guatemala y Sperisen fue condenado en Suiza. En España, en un fallo dividido, dos de los tres jueces absolvieron a Vielmann. No obstante, sí reconocieron que los crímenes habían sido cometidos por una estructura paralela. Aquí, un análisis del fallo, por el periodista Asier Andrés. En el análisis se recuerda como uno de los jueces, el minoritario, protestó porque no se habían considerado elementos de prueba –declaraciones de testigos clave– que inculpaban a Vielmann.
Esta acusación de 2018 es por otros tres asesinatos –dos fugados y un ciudadano hondureño– y por cuatro torturas. En esta acusación de 2018 sí se toman en cuenta esos testimonios de testigos clave ignorados en España, y se suman en total 43 declaraciones de testigos, necropsias, documentos internos y publicaciones que muestran contradicciones entre Víctor Soto y Sperisen y presencia y conocimientos de Víctor Soto, Víctor Rivera y Vielmann sobre la escena del crimen. Entre los testimonios no solo están ciudadanos sino también policías y jefes de grupo de policías.
Hay otros dos asesinatos de fugados que todavía están en investigación.
El crimen ‘más popular’
Sobre el papel la acusación es un manual de ética porque se persigue a acusados poderosos por haber cometido un crimen contra los delincuentes más detestados por la sociedad y contra un ciudadano hondureño que vivían en un barrio marginal.
Pero las investigaciones no se hacen solo en papel sino en sociedades políticas.
Políticamente este caso representa una montaña de dificultades para la CICIG y el MP.
El MP y la CICIG acusan a esta estructura por un delito tan popular entre la opinión pública conservadora –torturar y matar a los delincuentes o a quienes puedan ser sospechosos– que ha logrado elegir presidentes en Guatemala, Honduras, El Salvador en las últimas dos décadas con propuestas de Mano Dura y Súper Mano Dura, y que tiene su más reciente capítulo con la elección hace dos días del candidato de extrema derecha Jair Bolsonaro en Brasil.
El delito de tortura, considerado de lesa humanidad, todavía tiene monumentos contemporáneos, como el centro estadounidense de Guantánamo, fundado por George Bush, que no fue cerrado por Barack Obama y que ahora es aplaudido por Donald Trump.
No obstante, el MP y la CICIG en Guatemala quieren cumplir la ley y que estos delitos cometidos entre 2004 y 2007 no queden en la impunidad.
El pulso contra la élite
Hay otro factor de economía política que no se incluye en el papel de la acusación. Carlos Vielmann Montes no es un ciudadano más. Durante su administración como Ministro promovió en el Congreso la aprobación de la CICIG, persiguió a las estructuras de secuestro –de manera legal y de manera ilegal–, protegió a periodistas amenazados de muerte por políticos, y sus equipos ayudaron a resolver –de manera legal– muchos secuestros y secuestros exprés.
Pero además es parte de las familias aristócratas de Guatemala, fue presidente de la Cámara de Industria y su millonaria defensa el juicio de siete años en España fue pagada por corporaciones empresariales guatemaltecas.
Es considerado como un héroe por muchas familias de la élite, que han acompañado el boicot a la CICIG por las investigaciones que ha habido en los últimos tres años contra de medio centenar de empresarios acusados de delitos de corrupción, evasión fiscal o temas ambientales.
En esta entrevista con uno de los promotores del lobby contra la CICIG en Estados Unidos, el empresario Fernando Sáenz resume su visión sobre el tema: “Los empresarios… todos hemos cometido delitos, pero la CICIG no fue pareja y politizó todo”.
La Cámara de Industria, que en el pasado protestaba por las conferencias de prensa en las que el MP y la CICIG explicaban las acusaciones, publicó ayer un comunicado en el que exigía que el MP y la CICIG explicaran pronto a la ciudadanía de qué se trataba el caso. Pidieron que se garantice la seguridad y la integridad del exministro, que fue enviado a la cárcel en la base militar Mariscal Zavala.
La historia que se repite con el policía pro-CICIG y el viceministro anti-CICIG
Si bien esta acusación puede ser impopular –acusar a policías por haber asesinado y torturado a delincuentes y un ciudadano hondureño–, si bien puede ser cuestionada porque Carlos Vielman ya fue absuelto en Madrid por un caso similar después de un juicio de siete años en Madrid –aunque hay nuevas evidencias, y Sperisen y Víctor Soto sí fueron condenados por un caso similar–, hay otro elemento de peso a favor de los motivos del MP y la CICIG para presentar este caso en 2018, casi 15 años después de que hubieran sido cometidos los crímenes:
Hay dos integrantes de esta estructura ilegal de policía –acusada de estos asesinatos– que siguieron su carrera en el Ministerio de Gobernación.
Se trata de Stu Velasco, quien fue subdirector de la PNC hasta enero de este año y era considero un elemento técnico y además pro-CICIG.
Y Kamilo Rivera, hasta ayer viceministro de Gobernación de Enrique Degenhart y quien ha sido un elemento clave en el boicot al MP y a la CICIG. Kamilo Rivera ha llegado al extremo de negar patrullas y policías para capturas de acusados de corrupción.
Además, durante su administración habían regresado las alteraciones de escenas del crimen por parte de la PNC, algo que se había prácticamente eliminado desde que llegó la CICIG al país. El ejemplo más burdo fue un caso en el que obligaron a un acusado de extorsiones a actuar como que estaba escapando de un comando de la PNC. Aquí, el video.
En la acusación del MP y la CICIG en contra de la estructura de la que formaba parte Kamilo Rivera, se le acusa no solo de los asesinatos sino de alterar las escenas del crimen para aparentar que eran combates.
Ayer, en otra muestra del compromiso del Gobierno de Jimmy Morales y Enrique Degenhart con la impunidad, el viceministro Kamilo Rivera se fugó. A pesar de contar con un grupo de 24 policías para protegerlo, ninguno pudo capturarlo. Incluso devolvió la llamada a la radio Emisoras Unidas y dijo que no sabía de la orden de captura en su contra y que se había enterado que el MP y la CICIG estaban allanando su casa.
Ayer en la mañana, el Ministro de Gobernación, Enrique Degenhart, respondió que no había sido notificado oficialmente de la orden de captura, por lo que todavía consideraba a Kamilo Rivera su viceministro.
Desde ayer a mediodía fue declarado prófugo por la justicia guatemalteca.
La conclusión del MP y la CICIG
Durante la presentación del caso, el jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Juan Francisco Sandoval, leyó una frase para terminar la explicación del caso.
“Ningún delito, ni aún de la naturaleza de los cometidos por los prófugos, justifica que las fuerzas de seguridad operen como criminales”.
Gilberto Suarez /
Todo mundo da su opinion, pero al final los numeros parecen claros, durante el tiempo que esta gente opero fueron los años mas violentos. Justificar que anden matando delincuentes solo porque asi se sienten seguros es tonto e infundado, ademas que luego empiezan a hacer cosas como lo de los diputados del Parlacen cuando ven que tienen poder.
Ana Espada /
Los empresarios de este pais casi siempre son delincuentes siempre han usurpado tierras, cometidos tierras arrasadas por las tierras que hoy ostentan son culpables del atraso en el cual nos hemos mantenido han financiado a politicos y puesto y quitado presidentes con financiamiento ilicitos hacen negocios sucios, evaden impuestos y se dan el tupe de pedir que les devuelvan el credito fiscal, arremeten contra todo aquel que no piensa como ellos o les soba la leva, y son los enemigos reales del pueblo y para ellos delinquir es facil pues quieren que el sistema de justicia sea para ellos siempre de inocentes y el pueblo siempre culpable, vielman es eso y mucho mas junto a sus secuaces. es tan maton como un marero la diferencia es que uno estudio en buenso colegios, y el otro es un paria de la sociedad gracias al nene del colegio bueno.
Jaime Rocha /
Lo que mas me llama la atencion es: la utilizacion de testimonios de gente que le dan pisto y cantan Luna de Xelaju en 5 idiomas. El cuento del secuestrador diciendo: perdoneme la vida, ayer era secuestrador y asesino, pero ahora soy Pastor evangelico. Y habiendose escapado del infiernito unos dias atras. Y recuerdo las atrocidades que cometió esa banda Agosto negro, eran sanguinarios a morir. Merecerían clemencia esos delincuentes? A toda vista, éste es un caso politico para no soltar el mango del sarten y tener agarrados de los h...vos a mucha gente de interes. Es cierto, creo que la Cicig necesita mas a Guatemala que Guatemala a la Cicig. Se gastan millones de millones armando casos politicos que no benefician en nada al Pais. Hoy el beneficio es para secuestradores asesinos. Donde se ha visto eso?
Carlos Perez /
Y si ahora hicieran limpieza social con los internos del Mariscal Zavala usted también estaría de acuerdo?
en perspectiva /
se nota que muchos de los integrantes de nomada viven en residenciales cerrados y no tienen problemas con maras y más.
jose contreras /
Mi familia sufrimos el asesinato de un familiar en 2007. Hoy sigue COMPLETAMENTE IMPUNE. Se me hinchan los huevos de ver que los recursos se destinan a dar justicia a los lideres de la banda agosto negro, mientras nosotros con los papeles en archivo...
en perspectiva /
Guatemala necesita a CICIG............o CICIG necesita a Guatemala?
Víctor López /
Esto va a pasar: declaran culpable 30años a Vielman, apelan la sentencia, sale libre, viene Vielman y demanda al estado, gana el caso, le dan 50 millones... Iván sigue ganado buen billete aunque no este aqui... Los abogados defensores se van hartar , consuelo porras será la próxima presidenta , después de thelma... La explotación al pueblo va seguir , EL CACIF CON más poder, Dionisio con sus juegos artificiales entreteniendo a los tontos, la cervecería con su árbol gallo , entreteniendo a otros tontos... Y NOSOTROS TRABAJANDO COMO BURROS PARA SOSTENER AL ESTADO... Y Cada día más viejos y sin pisto.
frank lopez hurtarte /
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RODRIGO POLO (Alias Victor Lopez)
Es muy probable que desde el netcenter donde permaneces sentado 24/7 trabajés muy duro.
Pero dudo de que facturés tus servicios, y menos que pagues impuestos.
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Víctor lopez /
Repito, no soy el señor polo, EL SE MUERE POR JIMY YO NO. Lo que sucede es algunos les duele, que sea muy realista y les duele que tenga la razón. Saludos don frank.
Hugo Francisco /
Se alborotò el avispero de criminales en el CACIF: son evasores fiscales, son financistas de partidos corruptos, son financistas de golpes de estado, son patrocinadores de cabildeos anti-CICIG, son contrabandistas mayores, son negreros con los trabajadores, son criminales de cuello blanco...son unos malditos hijos de la gran p....madre..y deberìan estar todos en la isla de los hombres solos.
frank lopez hurtarte /
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CARLOS VIELMAN:
EL PUENTE QUE UNE AL CACIF CON EL CRIMEN ORGANIZADO
De estirpe sanguinaria, Carlos "El Chonte" Vielman representa el vínculo que une a la oligarquía con las CIACS, ésos cuerpos ilegales que tanto temen a Iván Velásquez y a CICIG.
En la época de los secuestros a los miembros de la familia Novella y Botrán, encontraron un MP y Policía inoperantes, instituciones que ellos mismos diseñaron por medio de los políticos.
Entonces llamaron al venezolano Víctor Rivera porque no confiaban en el sistema guatemalteco. Y ¡ojo! después de utilizarlo mandaron a eliminarlo. De la misma forma que a los hermanos Benítez.
Hicieron los mismo con los policías que asesinaron a los diputados del Parlacen. Los "callaron".
Y ahora este jefe de los Escuadrones de la Muerte del CACIF viene a denunciar persecución política y arremete contra CICIG. Y el mismo CACIF publica un comunicado de prensa para defender a uno de sus operadores criminales ¿qué tal?
Estado de Derecho sí, pero solo cuando les conviene.
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Víctor lopez /
No se equivoca , al decir esto ... Usted es de las pocas personas , que entienden estos temas , saludos don frank .
Rigo Caceres /
Y quien daba las ordenes? Lea http://www.derechos.org/nizkor/guatemala/doc/figueroa1.html