El artículo hablaba de los gustos personales en las parejas de casados acerca de quién toma las decisiones. Decía que a veces les gusta a las parejas ser un equipo, hacerlo todo juntos, a veces se dividían las decisiones y otras veces preferían que uno de los dos tomara todas las decisiones. Hasta el momento nada raro, pero después decía “tal vez quieras que sea tu marido quien tome las decisiones, mientras que tú lo sigues; si estás en esta situación significa que eres una esposa sumisa”. Porque obviamente, cuando una de las dos personas en el matrimonio toma las decisiones, “se entiende” que es el hombre.
El artículo estaba dividido en tres súper consejos. Tres acciones que se deberían realizar si uno quiere lograr eso de ser la esposa sumisa. Primero, decía, hay que dejar la toma de decisiones al marido. Que tal vez algunas del día a día, si él no está, por supuesto, las puede tomar ella; pero todas las importantes, no. El segundo consejo decía “ponte de acuerdo con tu esposo sobre qué es lo que realmente debes hacer o no”. Por último pero no menos importante, el tip era “pon dedicación a tu apariencia”. Que hay que arreglarse para complacerlo y apoyarlo.
Revisemos de nuevo esos consejos tan útiles. Si quiero ser una esposa sumisa tengo que callarme la boca, no tener ninguna opinión acerca de mi vida, la de mis hijos y mucho menos la de mi esposo. Además de no tener opinión no tengo poder. Segundo, cualquier acción que desee realizar debe ser previamente autorizada. Tomar una clase, trabajar, salir con amigas, manejar de noche, decir malas palabras, leer, cagar, comer y cualquier otra cosa que pueda ser gestionada. Y tercero, como soy un objeto, tengo que verme bonita. Eso es todo lo que importa que tan linda me veo para mi esposo. Porque cuando el llega a la casa cansado de un día de trabajo arduo yo tengo que verme impecable. Esa es mi manera de apoyarlo, ahorrarle el trabajo de tener que ver a una mujer desarreglada.
Pues no, ser una esposa sumisa no tiene un nivel de dificultad moderada, es lo más dificil que alguien me podría poner a hacer. Sin opinión, sin decisión, sin nada más que un hombre controlador que me diga que hacer. No, gracias. No, nunca.
Sumisas solo deberiamos ser cuando nos amarren a la cabecera de la cama y nos ordenen que no nos movamos mientras exploran el terreno debajo de nuestros ombligos. Sumisas cuando nos venden los ojos y nos hagan adivinar en donde está el hielo.
Obedecer solo si nos dicen venite, venite. Sumisas si preferimos sentir su peso sobre nuestro cuerpo. Si nos gusta que nos ordenen cómo y dónde ponernos entre las sábanas. Sumisas solo en la cama. Y sumisas solo si se nos da la gana serlo.
BART COSTALES /
Por otra parte, ser lider tambien es un trabajo dificil de llevar a cabo al 100% para cualquiera. Mandar con omnipotencia implica enfoque mental para tomar la decision que produzca el mejor resultado para todos los que afecta esa decision . Yo por uno no veo ningun atractivo en una mujer (u hombre) que quiera ser micro administrada(o), para quitarse todo el peso de la responsabilidad de las decisiones que incluso le corresponden a ella(el) de encima y delegarselas a su companero(a). Realmente es demasiado trabajo controlar cada aspecto de la existencia de otro ser humano, somos seres complejos y nuestras necesidades son dinamicas, cambian con cada situacion que enfrentamos y nunca encajan en un patron exacto que provee una referencia de comparacion que nos dmuestra sin duda alguna el mejor camino para emprender. He perdido la cuenta de cuantas veces le he dicho a una mujer que forma parte de mi vida, asi sea mi madre o mi media naranja, "Esa decision te corresponde a ti. No esperes que otro haga el trabajo mental que requiere esa decision y asuma la responsabilidad de las consecuencias de tomar esa decision."
Y en cuanto a lo de la sumision fememnia en la cama, estoy de acuerdo con la autora, en mi caso fueron las mujeres que me guiaron para servir como buen dominante en la intimidad. Pero lo que es bueno para la dama, tambien es bueno para el caballero. No asumamos que todas las mujeres son naturalmente sumisas en la cama, ni que todos los hombres quieren dominar en la cama. En la sexualidad, al igual que en el dia a dia, las cosas tampoco son en blanco y negro, existen muchos matices de gris, y si nos tachamos de tener una mente abierta, fallamos cuando no reconocemos que lo que percibimos ser la realidad de hecho sufre de las limitaciones inevitables cuando miramos todo a traves de el microscopio que construimos basado solo en nuestra experiencia de vida, y asumimos que el esquema que vemos como resultado de eso naturalmente debe corresponderle a, y encajar en, la vida de todos los demas.
ANONIMO /
Felicitaciones Flora, hermosa y esclarecedora nota.
Hombre feminista de 60 Años.
Joe /
ser sumisa es una decisión que la mujer decide tomar, es una experiencia! La autora con infusiones feministas creo que no entendió el tema que "investigo" en eHow..
Ser sumisa se refiere a la aventura de entregarle el control total al hombre al que tu decides confiar.
Yo lo acabo de experimentar y por eso puedo comentar sobre el tema.
Juan P duro /
Troglodita dominador ja ja ja
Juan Pablo Pira /
¿Para qué leer esa literatura? Con semejante título, era claro por dónde era el rumbo y que iba a irritar a la autora. Me parece que leer esto entra en el campo del masoquismo, pero no del tipo que sorprendió a Ana(stasia) la amante de Grey.
Esto me parece como que alguien del Opus pelee por la forma en que difaman a la Iglesia en uno de los Chick Tracts... ¿Y qué esperaba encontrar entre esas pastas?
Con mi hombre ya llevamos 6 años viviendo juntos en unión libre. Dormimos en dormitorios separados con baño propio, ha sido una gran experiencia, podes decorarlo como tu quieras, y tienes tus propios tiempos. Chicas existen los puntos medios en la pareja.