4 MIN. DE LECTURA

Actualidad Entender la política La corrupción no es normal Somos todas Identidades Guatemala urbana Guatemala rural De dónde venimos Blogs Ideas y soluciones
11 Pasos

Marco Pablo Pappa y su fichaje en el Club Atlético Agresores

El volante zurdo que creció en la zona 7 capitalina y que hoy está prófugo de la justicia por volver a agredir a una mujer, es parte de un grupo de deportistas -no solamente futbolistas- que bien podrían fundar el Club Atlético Agresores.

Blogs Blogs P369
Esta es una opinión

Marco Pappa en su primera detención en Guatemala.

Imaginemos ese momento, muy animado y con la sonrisa característica de siempre, esa de quien puede evadir la justicia a su antojo, Marco Pappa entraría a la gramilla luciendo la camisola del Club Atlético Agresores, esto luego de haber firmado un jugoso contrato y posado para la foto oficial.

Y es que estar en ese club deportivo no sería poca cosa, pues tendría equipos en todos los deportes, desde el fútbol, pasando por el baloncesto, el béisbol hasta el atletismo y otras disciplinas. Sus referentes abundan en todos los países, deportes y competiciones.

Para el Club Atlético Agresores no hay edad, puesto, ni liga que se quede afuera, pues además de deportistas para fichar, siempre tendrán aficionados que los apoyan incondicionalmente.

¿Quién dirigiría a Marco Pappa en ese equipo? Maradona tal vez, el argentino que por momentos no puede hilar dos o tres palabras sería el director técnico ideal, pues en su palmarés cuenta con una agresión a su novia en 2014. Diego Armando no dudó en lanzar un par de manotazos contra la mujer con quien tenía una relación sentimental mientras le decía: “seguís mirando el teléfono”. El video trascendió a los medios, pero como era de esperarse, pesó más el recuerdo de la “mano de Dios” ante Inglaterra en la Copa del Mundo de 1986, que dos manotazos secos contra una joven de 24 años, cuando él tenía 54.

Pappa podría tener de compañero en el once titular al holandés Rafael Van der Vaart, quien simplemente se limitó a decir: “soy un idiota, lo siento mucho”, luego de aceptar que agredió a su esposa durante la fiesta de Año Nuevo entre 2012 y 2013. ¿El resultado? Ella lo dejó, pero el fútbol le dio un abrazo para que él no se sintiera solito y luego de eso todavía pudo jugar en el Hamburgo alemán, el Real Betis de España y el Midtjylland de Dinamarca.

Los pases largos desde medio campo de Pappa podrían llegar hasta el mismo Cristiano Ronaldo, quien reconoció que pagó 340 mil euros Kathryn Mayorga para que desistiera de la acusación por violación. De eso ya hace varias temporadas en las que ha sido idolatrado tanto con el Real Madrid como con la Juventus y la selección portuguesa.

Y así la lista crece, se le agregarían los colombianos Pablo Armero, convocado por su selección luego de haber sido acusado de agredir a una mujer en Miami, y Hanyer Mosquera, quien quedó grabado por las cámaras de un ascensor cuando agredió a Hindira Herazo en 2016, propinándole puñetazos en la cara. También Renato Ibarra, un ecuatoriano que, jugando para el América de México, golpeó a la mujer con quien tenía una relación sentimental, ella tenía diez semanas de embarazo y no satisfecho también golpeó a la hermana que la acompañaba.

El club deportivo más grande del mundo

Pero dejemos el fútbol de lado. ¿Quiénes serían los representantes del Club Atlético Agresores en otros deportes? En el cuadrilátero tendríamos al boxeador Mike Tyson, quien estuvo seis años en prisión por golpear y abusar a una mujer de tan solo 18 años. Otro sería Floyd Mayweather Jr., quien no tuvo problemas con golpear a la madre de sus hijos frente a ellos.

Greg Oden, del Miami Heat, sería uno de los representantes en la NBA, sumado a Manolis Papamakarios, un conocido jugador griego, quien hizo que una mujer perdiera a su bebé a base de golpes en 2019.

La NFL tendría mucho por aportar y entre ellos podemos mencionar a De’Andre Johnson, quien golpeó a una mujer en el rostro dentro de un bar; Ray Rice quien golpeó a su pareja sentimental en un elevador y Ezekiel Elliott, acusado de golpear varias veces por un largo período a una mujer con la que tenía una relación. No olvidemos a Kareem Hunt, quien fue grabado en un video mientras pateaba a una mujer.

Para terminar no podemos dejar fuera a Oscar Leonard Carl Pistorius, quien en un relato aún confuso para la justicia, disparó cuatro veces en contra de Reeva Steenkamp, justo un Día del Cariño, el 14 de febrero de 2013, causándole la muerte. Pistorius recibió 13 años de cárcel y ahora es un reconocido líder espiritual en prisión, por lo que sigue ocupando encabezados de noticias.

Todos tienen una tribuna que los apoya

Debemos reconocer que tal vez somos muchos los que alguna vez hemos apoyado a uno de los fichajes estrellas del Club Atlético Agresores y eso es lo que nos debe hacer recapacitar. ¿Por qué lo seguimos haciendo? ¿Por qué valen más los goles, batazos, anotaciones, que los golpes, patadas y violaciones? ¿La victoria en el deporte prevalece sobre la dignidad de las víctimas? ¿Por qué como sociedad no podemos ponerle un alto a estas prácticas cuando alguien reconocido y admirado las comete? ¿Qué tanto perderíamos?

Aceptémoslo, hay muchos que incluso se sintieron muy indignados con los últimos episodios de Marco Pappa y quisieran verlo rendir cuentas ante la justicia, pero para nada se molestarían en gritar un gol suyo con la selección en las eliminatorias. ¿Dónde está nuestro balance? ¿Acaso somos aficionados del Club Atlético Agresores y no nos hemos dado cuenta?

El Club Atlético Agresores no solo es uno, son todos los equipos y marcas que alguna vez han apoyado a estos deportistas, acuerpándolos ante el escarnio público y argumentando que “la vida privada es aparte” o que “les darán una segunda oportunidad”. Mientras los seguidores no se quejen -no nos quejemos-, estas instituciones seguirán firmando contratos a favor de agresores y asesinos en potencia.

El equipo de Marco Pappa, Maradona, Myke Tyson y Pistorius ha ganado cada competencia importante en la que se ha presentado y se ha formado con base en nuestra doble moral, indiferencia, falta de identidad, agresividad, masculinidad tóxica, desigualdad y violencia de género. ¿Algún día lo mandaremos al descenso?

José Dávila
/

Comunicador. Las aulas me formaron como publicista, pero la calle como periodista y fotógrafo. Ahora resulta que quiero ser historiador, porque la verdad y la realidad muchas veces son dos cosas distintas en este país. Las redes sociales todo lo pueden.


Hay Mucho Más

5

COMENTARIOS

RESPUESTAS

    Jecca /

    25/08/2020 9:59 PM

    De lo mejor que he leído, excelente reflexion.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Eduardo Peletieri /

    25/08/2020 8:42 PM

    ¡Qué excelente columna de opinión! Una gran capacidad para escribir y hacer una analogía magistral. Felicitaciones José Alberto.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Boris osorio /

    25/08/2020 2:20 PM

    Tu ex jefe director de nómada y de seguro sigue de accionista es el director técnico de ese equipo de abusadores

    ¡Ay no!

    2

    ¡Nítido!

    Estuardo spillari /

    25/08/2020 10:56 AM

    Apoyo al periodista que creo está nota y lo instó que sea un buen Hombre en todo lo que haga .De esas lacras prefiero no hablar .

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!

    Mario A figueroa /

    25/08/2020 10:46 AM

    estos personajes ejemplares son como el Nerón moderno que gobierna el imperio, misógino, racista, cínico, pero todos le aplauden en cada aparición esperando que haga la próxima mulada para seguirlo adulando y sonrientes gritarle ESE ES MI TIPO.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!



Secciones