“Yo no cometí ningún delito. Ellos sí, y no tengo por qué avergonzarme”

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El celular de Jacqueline Pinto no dejó de sonar todo el martes 9 de abril. “Te conocemos y te apoyamos”, le decían por llamadas y mensajes sus familiares, compañeros y amigos. Ese día, la candidata a alcaldesa del municipio San José del Golfo por el partido Movimiento Semilla intentaba ser fuerte mientras vivía una pesadilla: un desconocido violó su intimidad, un desconocido difundió un video privado que ella grabó únicamente para su esposo.

En Guatemala, la violación a la intimidad sexual es un delito incluido en el Código Penal. En el artículo 190 se advierte a toda persona que, por cualquier medio y sin el consentimiento de otra persona, atente contra su intimidad sexual y se apodere o capte imágenes de su cuerpo para afectar su dignidad será sancionado de uno a tres años de prisión.

También establece que una persona que difunda, revele o ceda a terceros imágenes captadas, podría pasar en prisión de dos a cuatro años. A pesar de eso, el martes de esta semana, sin ningún temor, ni precaución, circulaba por varios chats y grupos de whatsapp, un video íntimo de Jacqueline.

—Ese video se lo grabé a mi esposo hace tres años, cuando cumplimos 15 años de casados. Hasta ahora, tengo 18 años de matrimonio y jamás he tenido ningún problema en ese aspecto, son cosas que no tienen nada de malo. Nunca imaginé lo que iba pasar—, dice la candidata.

A Jacqueline aún le sorprende cómo algún desconocido tuvo acceso a ese video y violentó su intimidad. No tiene claro quién, ni de qué forma, ni con qué medios alguien tuvo acceso a imágenes que ella grabó desde un celular, dispositivo que asegura perdió hace más de dos años.

Lo que sí tiene claro es que este ataque tiene fines políticos y que no es ella quien debe sentirse avergonzada, sino quienes incurrieron en el delito de violar su intimidad sexual y difundieron contenido que jamás debió salir de su dispositivo móvil.

No es la primera vez

Jacqueline aspira al puesto de alcaldesa en San José del Golfo, un municipio ubicado en la región metropolitana del departamento de Guatemala.

—He sido atacada desde que se enteraron iba participar en la contienda electoral, cuando quería involucrarme en el Movimiento Semilla empezaron a atacarme en forma de intimidación—, asegura.

A pesar de eso, decidió inscribirse como candidata y se protegió con medidas de seguridad, para ella y su familia, con el temor de que sus hijas pudieran salir afectadas.

—Las intentaron intimidar cuando salían de la escuela—, cuenta.

En septiembre de 2018, ese mismo video fue difundido por primera vez, pero no fue visto más allá del municipio. La candidata está convencida de que la intención de mostrar esas imágenes era, de alguna manera, afectar su reputación porque en esa época ella se había integrado al partido político y estaba en proceso de inscripción.

—Pensaron que con eso yo iba renunciar al partido, o que el partido me iba a expulsar. Aquí (en el municipio) siempre vieron a Semilla como el partido más fuerte, el partido del cambio. Estábamos haciendo las cosas bien, de manera transparente—, señala.

Su puesto de candidata lo buscaron otras personas que “se vendieron” ante la población del municipio como “la mano derecha de Thelma Aldana (la presidenciable de Semilla), pero Jacqueline se ganó la candidatura luego de dos años de trabajo con el partido, asegura.

Jacqueline Pinto en una de las activiades proselitistas en San José del Golfo.

Chats “para hombres”

La primera vez que el video llegó a manos de desconocidos y puso a Jacqueline en el blanco de las críticas y los ataques, las reacciones de sus allegados fueron de respaldo. Otros, en cambio, aprovecharon el momento para atacar su prestigio. Pero, ¿cómo pudo llegar a tantas personas?.

—Aquí, en el municipio, existen varios chats de hombres en los que ya habían difundido muchos videos y habían viralizado fotos hasta de niñas, menores de edad teniendo relaciones sexuales, mujeres masturbándose, mujeres desnudas, a medio vestir y cosas así—, relata.

Un poco antes de que eso ocurriera perdió su teléfono pero no le prestó importancia, y solo se preocupó por recuperar su número y hacer un reporte de robo. Asegura que el contenido de su teléfono lo había borrado por ello no consideró nunca que alguien pudiera hackearlo y obtener esas imágenes.

En ese momento no colocó ninguna demanda o denuncia porque estaba en medio de un proceso de inscripción y “no quería, por nada del mundo, que eso se derrumbara, algo por lo que había estado luchando hace mucho tiempo”. Con el apoyo de miembros del partido, de su familia y amigos, decidió continuar con el proceso.

En esta segunda ocasión, el video circuló por distintas plataformas pero a nivel nacional y llegó a ser contenido de debate en redes sociales y algunos medios de comunicación.

Comunicadores como Estuardo Zapeta incluso ofreció, en su programa radial, compartir “el video que recibió” y mencionó el nombre de Jacqueline, y el partido político que pertenece.

Mis enemigos creen que yo publiqué en mis redes un video de una candidata. NO he publicado eso que ellos dicen. Volví a ganarles.

— Estuardo Zapeta (@ezapeta) April 10, 2019

Zapeta, también analista político y locutor en el programa radial Libertópolis, se burló de lo sucedido y posó para una fotografía, mientras sostenía su celular con el video de la candidata en la pantalla. La fotografía se difundió en redes sociales y hubo reacciones críticas al comportamiento de Zapeta. Hasta ahora, no se ha disculpado.

El medio digital Soy502 publicó una nota donde se incluyó las imágenes. Sin embargo, horas más tarde, la publicación fue eliminada y el medio difundió un comunicado donde se disculpaba por el error.

“Este martes 9 de abril, Soy502 publicó una noticia con partes de un video de una candidata a alcaldesa de San José del Golfo en que bailaba y se quitaba la ropa. Lamentamos el error al haber publicado un material sensible e íntimo, por lo que eliminamos la publicación y luego abordamos la noticia desde otro ángulo”, publicó el medio.

DISCULPA PÚBLICA

Ofrecemos una disculpa por este error a nuestros lectores y especialmente a la candidata, Jacqueline Pinto, del partido Movimiento Semilla. pic.twitter.com/sAQkRQwFsp

— Soy 502 (@soy_502) April 10, 2019

Jacqueline pensaba ser lo suficientemente fuerte para recibir un golpe de este tipo.

—La verdad es que pensé que estaba preparada para esto, porque sabía que iban a usarlo para atacarme, pero es mucho más difícil de lo que uno piensa. Me advirtieron que cuando empezara mi campaña, iban a perjudicarme con el video—, indica.

Jacqueline se preparó mentalmente para un ataque de esa magnitud pero eso no amortiguó la impresión que sintió cuando fue agregada a un grupo de whatsapp, integrado por varios desconocidos que se burlaban de su video y hacían comentarios ofensivos e irrespetuosos sobre su cuerpo.

La ventaja de sentirse apoyada

—¿Qué pasó?—, le preguntó su esposo, al regresar a su casa ese día en el que la intimidad de Jacqueline andaba en boca de desconocidos.
—Nada, lo hicieron (difundir el video) a nivel nacional y voy a seguir adelante, no me voy a dar por vencida—, le respondió ella.

El respaldo que recibió fue amplio: su esposo, amigos, familia y el partido político al que representa. Quizá por eso intenta mantenerse fuerte pero le afecta mucho ver de qué forma este ataque no solo la golpeó a ella, también a sus papás y especialmente a sus hijas.

—Ese día mi teléfono nunca dejó de sonar, recibí mucho apoyo de mis amigos, mi familia y eso fue lo que me fortaleció, porque en ningún momento recibí alguna notificación mala, a mi teléfono no entró ningún comentario negativo—, dice.

Más allá de ese respaldo, no deja de ser una experiencia traumática y dolorosa que afecta a la persona señalada directamente pero también a su círculo cercano.

—De verdad dan ganas de salir corriendo, a una montaña y gritar, sacar todo eso—, añade.

Sus papás son pastores evangélicos. Sus hijas aún son menores de edad y también tuvieron que enfrentar burlas y bromas pesadas.

—Mi hija más grande sufrió de bullying, le hacían comentarios de “mira, qué buena está tu mamá”, “mira, yo voy a ser tu papá”.

La candidata se considera una mujer fuerte, difícil de derrotar y además es una persona rodeada de personas que la apoyaron. Según su experiencia, “más allá de lo que digan de tu cuerpo y de ti”, el daño más grande es observar la manera en que una situación como esta afecta a sus seres más queridos.

—Ese tipo de personas no piensa en el daño que le hacen a terceras personas, que es lo que en realidad afecta porque a uno le pueden hacer lo que sea pero cuando se meten con los hijos, eso sí duele.

“Es motivo para quitarse la vida”

Después de todo lo ocurrido, Jacqueline tomó terapia psicológica y, por ahora, está más tranquila. El momento más duro pasó y si algo tiene muy claro es que no tiene motivos para avergonzarse o sentirse humillada. Lo que sí necesita es hacerse escuchar y desahogar la pesadilla que vivió, que también muchas mujeres han tenido que pasar cuando son víctimas de abusos de este tipo.

—De mi familia yo soy la más fuerte, yo siempre he sido la que pelea, la que lucha, la que se preparó para esto. Por eso cuando todo esto pasó yo sentí que tenía que ser fuerte y demostrar esa fortaleza frente a mi familia, mis padres y mis hijas. No tuve tiempo de desahogarme—, confiesa.

En medio de todo, ella se siente afortunada. Sabe que tuvo la dicha de recibir más apoyo y respaldo que burlas y críticas. Incluso, recibió el apoyo del partido que la impulsa como alcaldesa.

El partido Movimiento Semilla publicó un comunicado para manifestar su apoyo y condenar el ataque a su privacidad y su dignidad. También ratificaron su candidatura.

De no haber recibido tanto respaldo, de haberse sentido juzgada por su familia, por su esposo y sus hijas, la historia habría sido distinta.

—Yo conté con la ventaja de tener a muchas personas conmigo, pero yo creo que alguien que se sienta sola en esta situación no podría soportarlo, es hasta motivo para quitarse la vida—, analiza según su experiencia.

Jacqueline Pinto en una de sus actividades proselitistas en San José del Golfo.

“Sigo al pie de la batalla”

Hace 15 días, la candidata se presentó oficialmente como candidata del Movimiento Semilla en San José del Golfo. Ella lideró una caravana que recorrió las calles del municipio.

Después de todo lo ocurrido, Jacqueline sabe que no se equivocó de partido, porque fueron leales con ella y con esa motivación continuará con su campaña.

—Sigo adelante, sigo al pie de la batalla.

La candidata es licenciada en Administración pública y hasta 2014 fue asistente de academias deportivas en el Viceministerio del deporte y la recreación.

En medio de sus temores, su recuperación, su campaña, tiene una certeza:

—La verdad es que yo no cometí ningún delito, ellos sí y no tengo nada de qué avergonzarme—.

Mientras tanto, en la Fiscalía de Delitos contra la Mujer, esta semana, se abrió un nuevo expediente. El Ministerio Público ya investiga a quienes estén detrás de este ataque, quienes hayan extraído las imágenes, quienes las hayan difundido, podrían ser castigados hasta con cuatro años de prisión.