Nuevos sabores, nuevas ofertas: lo que siempre deben buscar

La mañana empieza con actividades para niños. Luego, un genial set de música acompaña durante todo el día excelentes aromas y experiencias. El mes pasado tuve el gusto de ser invitada por una amiga y me la pase muy bien. Desde que se pasa por la puerta se pueden apreciar los aromas de todos los diferentes productos que ofrece el mercado.

Caoba Farms que cuenta con su propia tienda, y en ella se puede comprar todo tipo de lácteos, quesos, carnes, productos orgánicos y sin gluten, así como hortalizas de su propia cosecha. El ambiente es agradable y muy cordial, con un poco de todo para todos los gustos. Las ventas se manejan con un sistema de tickets de diferentes colores que Caoba vende, y con ellos –en lugar de efectivo– uno va comprando lo que se le antoja. En mi caso, casi todo. 😀 (Por cierto, es muy importante que calculen bien el efectivo que van a necesitar).

Mi amiga y yo empezamos el tour hacia el lado derecho de la puerta, donde probé comida árabe muy buena. Seguimos con las chicas de Musli, que hacen sus mezclas muy originales de productos para el desayuno –que ya podemos encontrar en distintos lugares de venta, como Watson en Paseo Cayalá. Luego encontramos productos de aceite de macadamia que estaban muy buenos, incluyendo un chapstick que me tiene loca.

Así llegamos al primer lugar de comida que me encantó: Antojos Vzla, “algo diferente”. Era una estación de arepas que estaban geniales. Yo tuve el gusto de probar la de cerdo (Q25) y me pareció magnífica. Además, las señoras que estaban atendiendo eran muy agradables.

Frente a ellas estaba la caja de Caoba, al igual que una barra que tenía aguas, cervezas nacionales y las famosas cervezas orgánicas Peak. Al seguir bajando por el camino predestinado, llegamos al área donde estaban las actividades de niños. A la par encontramos unas mesas con productos de cacao, picositas y unos panes de pierna que se miraban muy buenos. Sin embargo, lo que más me gusto del área fueron los Eco Bambas, unos zapatos elaborados 100% con materiales reciclados –sacos de café, pashte en la parte interna, telas pintadas a mano, etc. Todo tipo de modelos y tamaños. Realmente un proyecto interesante.

Un clásico de la comida venezolana: las arepas.

Al terminar la vuelta y subir las gradas se encontraba Pappy’s BBQ, un restaurante local que ofrece pavo y diferentes productos ahumados. Olía excelente y el ambiente estaba muy bueno. A un lado estaba un comal con unas señoras muy amables vendiendo tortillas verdes de moringa con queso, guacamol y frijoles. Ya había probado antes las tortillas verdes de chaya, así que esta nueva opción me llamó mucho la atención y decidí comerme una porción de Q25 que estuvo excelente. El sabor era muy fresco y rico, la textura muy agradable: una magnífica experiencia para un súper alimento que desconocía.

Al pasar el comal se encontraba Red White and Brew, una fantástica micro cervecería antigüeña que ofrecía tres tipos distintos de cerveza. Me encantó la Red Irish que tenían.

Al seguir caminando un poco estaba Mandarina Bydre, una joyería única con productos muy diferentes que suele usar de formas muy creativas ciertos elementos típicos. Los collares estaban muy bonitos y las pulseras eran simplemente impresionantes.

El tiempo voló y para mí fue un sábado magnífico rodeada de buena música, excelente comida y personas muy agradables. Les invito a visitar el Farmer’s Market cuando puedan, así podrán probar productos y experiencias diferentes en este espacio que ofrece algo para cada gusto.