Natalia tiene casi 8 años. Pero su pequeño cuerpo equivale más al de una niña de 6. Su sonrisa es grande, una media luna brillante de dentadura blanca combinada con dientes de oro que hasta ahora se dejan ver. Antes solo lloraba de sol a sol porque quería regresar a su casa en Cantón María Montaña, afuera de Jutiapa. No quería estar en el hogar donde fue ingresada el 22 de febrero de 2018 para protegerla de su propia familia.
Aún así, pasaron tres meses para que se emitiera una orden de captura en contra de su papá Pedro Roberto Méndez García, de 45 años, y Wester Pedro Méndez Hernández, el hermanastro de 24 años. Ambos acusados de violación y abuso sexual.
¿Por qué las autoridades se tardaron tanto en reaccionar?
Con la pistola debajo del colchón
Natalia vivía con sus papás y hermanos en Cantón María Montaña en una casa sencilla. Tenía un cuarto con tele y baldes de ropa, y un dormitorio con dos camas para los siete miembros de la familia. En una dormían los tres hijos más grandes, de 9, 11 y 13 años. En la otra cama dormían Pedro, su esposa Natalia y el hijo más pequeño.
En esa misma cama fue donde Pedro violó a su hija por primera vez un jueves por la mañana en 2016. Ella se recuerda del peso del hombre robusto. Gigante comparado con el suyo, el cuerpo de una niña de 5 años. También se recuerda de la pistola que su papá guardaba bajo el colchón. Esa misma tarde la volvió a violar. Al día siguiente también. Y así a su antojo durante dos años.
Pedro Roberto Méndez García tiene 45 años y siempre cargaba un gran fajo de efectivo, dicen fuentes de Jutiapa. Es miembro del Comité de Desarrollo Campesino (Codeca) y en las elecciones para alcalde en Jutiapa en 2015, se postuló como concejal titular para el candidato Jaime Estrada García del partido Todos.
Es un hombre con influencia en su comunidad y acostumbrado a ejercerla cuando lo considera conveniente. A pocos días de que Natalia ingresara al hogar, dos agentes de la Policía Nacional Civil llegaron para averiguar, como un favor personal a Pedro, si Natalia se encontraba en el hogar y con quién se relacionaba. Después Pedro, comenzó a llegar e insistía en ver a su hija. Su “princesita”, como decía. El personal del hogar no lo permitió. Intentó sobornar a una persona de la escuela donde estudiaba la niña para que le consiguiera información, pero allí tampoco tuvo suerte. Estaba desesperado.
Un bombón por una foto
El abuso sexual que vivía Natalia llegó a la atención de las autoridades cuando a principios de febrero de este año, en la sede de la Procuraduría General de la Nación, en Jutiapa, recibieron un celular registrado a nombre de Wester Pedro Méndez Hernández.
Wester, el hermanastro de Natalia, no se quedaba solo con las violaciones que hacía bajo la protección de los vidrios polarizados de su carro cuando la llevaba a hacer mandados. Entre las fotos guardadas en su celular había varias de Natalia. De sus genitales. Fotos de las partes íntimas de una niña de 7 años.
“Déjate sacar fotos y te doy un tu dinerito”, le decía Wester para manipular a Natalia. Le daba Q1, a veces Q3. Pornografía infantil por el precio de un bombón y una agüita.
Natalia nunca dijo nada sobre los abusos. Le daba vergüenza. Aparte odiaba cuando sus papás peleaban porque su papá le pegaba mucho a su mamá. Tanto que una vez, recibiendo una golpiza particularmente fuerte, la mamá le rogó a Natalia que le trajera la pistola debajo del colchón para que se pudiera defender.
Por eso, aunque Natalia lloraba y amenazaba con contarle todo a su mamá, luego desistía y le hacía caso a su padre. La lógica sucia de un abusador: “tu mamá se va a enojar conmigo, vamos a pelear y terminaría golpeándola. Todo porque tú le dijiste”.
Pero la señora ya sabía. Encontró a su esposo sin ropa encima de Natalia y lo regañó, cuestionándole por qué lo hacía si para eso tenía esposa. Nunca dijo nada tampoco. Si lo hubiera denunciado, no tendría con qué proveer para Natalia y sus cinco hermanos. Incapacitada por su dependencia, cómplice involuntaria, su único remedio fue sobar a su hija con pomadas cuando la niña, su hija, se quejaba por los dolores en su vagina y su ano.
Un hombre de “plomazos”
El día que Pedro fue capturado llevaba puesta una camiseta de mangas largas con tela de camuflaje y un logotipo en el pecho que dice Ejército de Guatemala, sin embargo su nombre no aparece en los registros militares.
Natalia se recuerda, que una vez la PNC llegó por Wester. Su papá lo escondió en su casa porque aseguraba que allí la policía no se atrevería buscarlo. Y si lo hicieran, prometía responder a “plomazos”.
Al ser descubiertas las fotos de Natalia, la PNC llegó a Cantón María Montaña para rescatarla. Esa vez también respondió con intimidación. En cuestión de minutos la patrulla fue rodeada por un grupo de vecinos, supuestos miembros de Codeca, liderados por Méndez García. No se iban a quitar hasta que los agentes bajaran a la niña. A pesar de que un familiar reconoció a Natalia en las fotos del celular, el rescate falló. Regresó a su casa.
El medio local Sucesos Jutiapa publicó que Pedro es líder de Codeca en Jutiapa y Wester, miembro. Neftalí López, dirigente de Codeca afirma que Roberto sólo es miembro de la organización, pero no dirigente. López asegura que la organización ha sido difamada por medios de comunicación locales controlados por políticos, terratenientes y finqueros. Luego aclara:
–Lo importante es que si estos señores, sean o no de Codeca, han cometido algún delito, que les caiga todo el peso de la ley.
El 22 de febrero la policía logró rescatar a Natalia mientras estaba en su escuela.
Cuatro días después, el 26 de febrero, un grupo de personas se volvió a unir en defensa de Roberto. “¡Queremos la niña! ¡Han secuestrado la niña!”, gritaron en protesta a la institucionalización de la niña afuera del Juzgado de la Niñez y la Adolescencia en Jutiapa.
El juez dictó que la niña se tenía que quedar en el hogar como medida de protección hasta que el caso quede resuelto.
Wester Pedro Méndez Hernández y Pedro Roberto Méndez García han sido ligados a proceso por violación con agravación de la pena. Enfrentan mínimo 16 años de privación de libertad. Por el momento, la acusación de la fiscalía de la mujer de Jutiapa contra Wester no incluye el delito de pornografía infantil, aunque la fiscalía lo puede agregar durante el proceso de investigación.
*Natalia es un nombre ficticio puesto para proteger la identidad de la niña.
Juan Vasquez /
excelente , a esos HDP, que los metan al bote el doble de 16 años y que los violen la MS o el barrio 18, y dicen que son de CODECA, ojala todos de esa organización no sean igual que estos de lo contrario pobre nuestro pais si caemos en manos de esta gente.
Patricia /
Que indignante noticia e indignante ver como las autoridades hacen oídos sordos a éste tipo de casos.
Ojalá, ojalá estén o esté de por vida en la cárcel.
Harold Mora /
Buena tarde señora periodista; que bueno que saquen a luz estos casos donde personas ligadas a esas organizaciones son los agresores. Al oír sus arengas donde se victiman diciendo que son criminalizados. Si estos son los futuros dirigentes del país que nos agarren confesados. Repito que bueno que al menos alguien se atreva a sacar a luz casos de violencia le falta investigar asuntos de robo o hurto como ellos le llaman a tomar electricidad y venderla. ---Palabras de su representante legal don Antonio Sandoval--- y no solo de esta si no que cualquiera que este engañándonos
Victor mejia /
Respeto la libertad de expresión pero este artículo más parece un chisme, de que me lo contaron y más pero no se puede generalizar a todos por igual,conozco a wester de años y me parece un hombre responsable con su trabajo y con su comunidad y quisiera que visite este lugar no muy lejos de la cabecera departamental y pregunte quien es wester y todos darán buenas referencias no así de la que era mujer de el una mujer que le fue infiel por haberla encontrado con un joven y de allí vienen todos los problemas.Del padre de wester no puedo opinar pues no lo conozco pero no hay que hacer leña del árbol caído.El que este libre de pecados que tire la primera piedra y no hay que opinar sin conocer a fondo la realidad.
Indira Franco /
La justicia debe ser enfrentada por quien comete delito alguno. Definitivamente. Lo que me parece bastante tendencioso y fuera de lugar es que nombre com tanto ahinco que este tipo es miembro de Codeca. Lo recalca con su titular. Por qué ese afán de nombrarlo. Ojalá así investigue y recalque los nombres de terratenientes, funcionarios empresarios que han actuado contra muchas de sus empleadas. La ética debe prevalecer. Y si este tipo sale sentenciado, favor le hará a la organización de Codeca de haberse librado de un delincuente.
Harold Mora /
Buena tarde doña Indira, por que su enojo que nombre a la organización, si cuando un policía o chafa comete un delito uds no dicen el policía o chafa X si no que nombra a la institución en si. Lo último que escribe si esta excelente pues los lideres deben se saber a quien aceptan o eligen. Agrego a la periodista de Nomada, aquí tienen un ejemplo a ponderar por los casos anteriores donde menores de edad han salido asesinadas o dañadas y nos condenan a todos al decir que fue el estado.
Alfredo /
Me parece que la gravedad radica en que lo cometen individuos que pertenecen a una organización que habla de luchar contra las injusticias, tiene un discurso dónde expresa buscar cambios sociales y mejoras para el pueblo. Entonces estos criminales no sólo cometen este execrable delito sino además manipulan a otros alegando otras razones de porqué los busca la justicia.
Y manipulan a otras personas aprovechandose de la confianza que les tienen uno por ser dirigente y el otro pues se supone integrante de una organización del pueblo, para ponerlos de escudo y tratar de evadir la acción judicial.
De los patrones y gente rica que comete abusos que podemos esperar. No se justifica, pero es como si un perro rabioso nos muerde.
En cambio de este par de sinvergüenzas, está igual que los religiosos (de cualquier religión) que cometen violaciones y agresiones sexuales. Se aprovechan de un poder y de la confianza que deposita la gente.
Por eso creo que se remarca que son de Codeca.
Debería ser un llamada para que esa organización depure a su gente y tenga más control de lo que hacen sus dirigentes. Deben dar el ejemplo para tener fuerza moral para hablar y hacer política.
Perla Cano /
Cómo puedo hacer para contactar al hogar ? que tiene a la nena ?!!! Me imagino que es de la Procuraduría!!! Si tuviera alguna info!!! Muy agradecida!!
Alfredo /
Cuántos casos más estarán sucediendo dónde los agresores, violadores, son pseudodirigentes de organizaciones dizque del pueblo. Lástima estos casos no los persigue la CICIG. Porque se trata de gente que se escuda en el poder que posee. Los depredadores no responden a ideología, sector social o religión en particular.
Gracias por publicar esta lamentable noticia. Ojala la pequeña víctima pueda rehacer su vida y que sea libre de violencia.
ernesto garay /
castración química a esos hijos del a gran puta
Marìa /
Quìmica NO, amputaciòn en pùblico y sin anestesia!!!!!!
Eva Sazo /
!Este tipo de bestialidades merecen la pena de muerte! !Qué todos los presos que estén a su lado le hagan lo que hizo con su hija, durante cada día de los pinches 16 años que estará encerrado! Ah, por supuesto, sumado a la castración.
Ob /
Es lamentable que siendo padre se le olvide el deber pricipal con su hija el de protegerla, es vergonsoso que se le diga padre a personas como esta. Como puede ser que la gente sea tan ignorante que se ponga del lado de este tipo de persona.
Krol /
Que indignante noticia. La cólera al leer todo esto no me ha pasado. Cómo es posible que le hayan hecho esto a una niñita de seis años. Por Dios, esto no tiene perdón alguno. Una posible condena de 16 años por tan cruel crímen, eso se queda corto, no es nada... Se debería considerar, después del juicio, castrarlos químicamente, eso es lo que de verdad y en proporción directa se merecen estos animales. Ojalá y en la cárcel se enteren los demás presos y se los... Justicia por favor¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Indira Franco /
Lamentablemente esas son las condenas tan paupérrimas para estos casos. Para mi que nunca salgan de la cárcel...