Resumen del día: El país en crisis y el presidente del Congreso remodelando el jardín (sí, con fondos públicos)

CGC: Fiscalizando y en búsqueda de ser fiscalizada

Por la mañana personal de la Contraloría General de Cuentas se presentó al Ministerio de Salud para iniciar una auditoría. Esto, luego que la semana pasada la Comisión Presidencial Contra la Corrupción hiciera una denuncia que terminó con la destitución de dos viceministros del gobierno de Giammattei. Las posibles anomalías van desde la sobrevaloración de medicamentos hasta adjudicar compras a empresas personales.

La contraloría también ha sido citada en dos ocasiones por diputados del Congreso para fiscalizar su labor durante esta crisis sanitaria. Cómo siempre, pareciera que la Contraloría se entera de las irregularidades hasta que alguien más les hace el trabajo. En un comunicado la CGC mencionó que muchos de ellos trabajan a distancia y que por ello no han podido acudir a las citaciones.

Una propuesta del partido más cuestionado

La bancada Todos, famosa por apoyar iniciativas poco beneficiosas para el país y liderada por Felipe Alejos, presentó una iniciativa de ley para que los funcionarios con altos salarios renuncien al 20% de su salario. La propuesta es esta: todos los funcionarios y diputados que ganen más de Q15 mil deberán entregar ese porcentaje de su salario para crear un fondo de atención a la emergencia del Covid-19.

La mitad de los recursos recaudados estarían destinados al Ministerio de Salud y la otra mitad para un bono de apoyo a los trabajadores de salud, que son los más expuestos al virus.

La propuesta sorprende porque proviene de uno de los diputados más cuestionados, que ha mostrado resistencia a la rendición de cuentas y los esfuerzos anticorrupción. Ah, se nos olvida un pequeño detalle: el salario nominal de los diputados es de Q9,500 así que por el momento ellos no sufrirían ningún descuento.

Lujos innecesarios en el Congreso

Sigamos en el Congreso. Q14 mil ha gastado el presidente Allan Rodríguez, con recursos del Congreso, para remodelaciones que favorecen su comodidad. Según una investigación realizada por elPeriódico, en medio de la crisis de salud, Rodríguez se recetó una ducha para uso personal y una jardinización en su área de descanso.

Mientras el gobierno habla de medidas de contención de gasto y los diputados simulan interés por destinar todos los recursos posibles a la gestión de la crisis, este tipo de gastos contrastan con los discursos de los funcionarios.

Personas con discapacidad olvidadas en la crisis

La Asociación Nacional de Ciegos de Guatemala comenzaron hoy la entrega de 450 bolsas de víveres para personas con discapacidad. Una parte de la población que está siendo invisibilizada en la crisis del COVID-19, indica Jorge Luis López, representante de la asociación.

Según el censo de 2018 hay 1.5 millones de personas con discapacidad en el país. Es una condición que, en muchos casos, conlleva otros factores de vulnerabilidad social como la exclusión, la pobreza y la desnutrición.

López lamenta que, a pesar que el presidente Alejandro Giammattei tiene una condición de discapacidad física, el Estado no está fortaleciendo la inclusión social de las personas con discapacidad durante la crisis del COVID-19.

Considera que es preocupante que se está invisibilizando a 1.5 millones de personas, que ya viven en condiciones de vulnerabilidad, y que no van ser tomadas en cuenta como beneficiarias de programas sociales que atiendan a sus necesidades específicas.