6 MIN. DE LECTURA

Actualidad Entender la política La corrupción no es normal Somos todas Identidades Guatemala urbana Guatemala rural De dónde venimos Blogs Ideas y soluciones
11 Pasos

Los Chunches de Benvenuto. Tres miradas y una voz.

Es media mañana, apenas el segundo día del II Encuentro de Mujeres Centroamericanas en las Artes Escénicas, y las chapinas nos hemos escapado un rato a visitar la exposición de Benvenuto Chavajay en el Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) de Costa Rica. La muestra, que ha permanecido allí un par de meses, será retirada mañana. Benvenuto está aquí, sentado en una esquina hurgando su computadora mientras espera el desmontaje.

Cotidianidad Opinión P369
Esta es una opinión

Obra por: Benvenuto Chavajay

Chunches (Mololon tak nakun)  es el nombre que ha/han dado a su muestra. La primera exposición individual de Benvenuto en un museo. Él se siente agradecido, reconocido. Dignificado es el término que utilizó una y otra vez para referirse a esta exhibición. Los chunches objetos de arte ocupan la sala principal, abajo Gaur (sic), una propuesta de video arte vascos. Esta me hace pensar en lo similares que son las preocupaciones de nuestros pueblos, el vasco y el chapín -pero el guatemalteco maya-, en el que la identidad, las desigualdades, los discursos encontrados se manifiestan una y otra vez como piezas medulares de una conversación revuelta que apenas comienza.

chavajay benve

Bitty Herrera (actriz), Andrea Mármol (artista visual) y yo, nos propusimos recorrer la muestra sin la guía de Benvenuto, esto claro, le sorprende. Estando él allí y pudiendo darnos el recorrido, lo hemos dejado de un lado adrede. Lo que queremos es compartir tres miradas distintas y luego, si acaso, contraponerlas con la explicación del gran jefe, del creador, del que transformó como él lo dice, los chunches en objetos de arte.

Leemos al unísono la presentación de la muestra:

Chunche, cosa u objeto, sin definición en el diccionario. Cualquier cosa, lo que sea, ropóy, tac stoý (en tz´utujil)

La exhibición denominada Chunches Molontaknakun) del artista guatemalteco Benvenuto Chavajay, se plantea como una revisión de su obra con el fin de repasar sus líneas de investigación más fuertes.

 

Según el artista: “en los últimos años he venido trabajando y reflexionando los objetos-chunches que están en la memoria colectiva, objetos sin sentido tirados en un lugar determinado, en una esquina de la casa, en un pavimento gris, en la carretera, en la chamusca infantil, o lo que se come o se pone diariamente. El papel del artista es reconocer estos chunches y dar otro valor hacia una trasfiguración sagrado estética”.

 

A partir de estos “chunches”, Chavajay trabaja desde la fotografía, los objetos intervenidos y la instalación para hacer posible la elaboración de un discurso que se hace cada vez más amplio, pero que parte de reafirmar lo propio de la realidad cultural indígena maya, desde un pueblo a orillas del lago de Atitlán en el interior de Guatemala, como lo es San Pedro La Laguna. Conceptos como modernidad/colonialidad son abarcados desde una perspectiva decolonial que pretende una confrontación y desprendimiento del “patrón colonial del poder” según Quijano, o como el mismo artista menciona: “sanar la herida colonial” desde el arte en la América profunda.
María José Chavarría, curadora MADC

 

Un plinto cubierto con capelo de vidrio cubre un puñado de granos de maíz atravesados por piercings. De la serie Anorexia. “Cuando lo tomás literalmente tiene esa relación de los granos con los dientes, la forma de los dientes con lo que comes y que eso sea asociado al maíz, especialmente ahora, en este tiempo en el que el piercing está de moda”. Yo coincido con Andrea con que la anorexia sitúa a la nutrición en un símbolo de moda. Bitty ve sin que la pieza cause efecto aparente en ella, le llaman más la atención de las tres piezas con las que sigue la muestra.

anorexia benvenuto

Doroteo Guamuche. Benvenuto se tatúa la cédula de vecindad de Doreoteo Guamuche… nombre usual, Mateo Flores. El avión de alas de terracota y cuerpo de maíz negro con llantas de plástico fotografiado y expuesto sobre un fondo perfectamente blanco. Y una foto de las mismas dimensiones que las dos anteriores en la que Benvenuto se tatúa su apellido originario Chav aj´ jay (Chav aj´= lodo. Jay= casa).

guamuch benve

Las tres piezas en diálogo perfecto nos generan la idea de reivindicación de la propia identidad, el avión que vuela silencioso entre los personajes pasa entre la imagen de la misma persona con dos tatuajes distintos que hablan de vejación al habérseles cambiado/manipulado el nombre, perpetua la idea del cambio de época. Las piezas nos generan cierta nostalgia e indignación. Ahora, un mes después, me hacen pensar en el insilio, en el estar allí/aquí sin poder ser por completo. Para Bitty el conflicto se sitúa en que jamás será reconocido y aceptado socialmente el “error”.

Seguimos el recorrido, no hemos logrado compenetrarnos en un diálogo claro. Las historias, nuestras tres historias, edades y situaciones han sido muy distintas, cada una tiene capacidades diversas no solo de ver sino de trasladar las ideas a palabras. Bitty, mujer de teatro, nos confía en algún momento que no tiene tanto contacto con las artes visuales y mucho menos con el arte contemporáneo. Andrea, vive en ello, se preocupa de forma permanente por la mediación y yo, que vivo en medio de ambos mundos y tengo una relación cercana con Benvenuto, me doy cuenta de que lo que me habla es su silencio.

Nuestras miradas tropiezan al unísono con la pieza Comalitos, cada una la ve desde su perspectiva pero a las tres nos queda claro que estas especies de lupas guardan el simbolismo del no ver. El texto de sala nos jala, nos refuerza la idea que inicialmente habíamos construido:  Pertenece a la serie Congelación, en donde se trabajaron objetos que tienen que ver con la violencia, objetos congelados, suspendidos, anulados y detenidos. Este barro quemado en forma de comal intenta tapar el cristal de las lupas como una manera de congelar la violencia mental, violencia emocional, violencia visual, lo contemporáneo se pierde en la línea gris de lo polarizado, el ir de un lado a otro, de acá para allá, del aquí y ahora, se ha perdido la silueta de la vida, se ha vuelto gris el paisaje las ciudades y entre sus habitantes se desconoce quién mira a quién. El vidrio polarizado agrisó mi paisaje y mi lago. Comalitos, barro y lupas de plástico. 2014.

Biblias, biblias en distintos idiomas mayas, biblias intervenidas, palabras sagradas sacadas de su contexto, traducidas, inducidas. Biblias en medio de la sala y alrededor de ella. Los acuerdos de Paz, pintados con yeso, borrados, semi descascarados. Hablan por sí solos. Como lo hacen el resto de las piezas.

Un breve texto nos atrae… Hay pueblos tan pequeños que caben en la mirada de un fusil, Luis Alfredo Arango, poeta guatemalteco. Pistolas de barro desmanteladas, armas que se apuntan a sí mismas. “Me gusta la historia que se puede crear de la aglomeración a la fragmentación de ese objeto, como que su propio disparo las fuera fragmentando, se destruyen unas a otras…” dice Andrea mientras Benvenuto explica otra pieza a un grupo de estudiantes y turistas. Les habla del Popol Vuh, de Junajpú e Ixbalanqué, de la abuela Ixmucané.

acuerdos de paz benvenuto

En todas las piezas la presencia de los abuelos mayas es evidente, aquí está el lago hecho espuma a través de piedras y suaves chapinas, están los hilos del tiempo, están los juegos de niño, las imágenes del tendedero, las que encuentras en una esquina.

Terminamos el recorrido impactadas con un telar tejido desde las dos puntas, un telar en el que las bordadoras se encuentran en un diálogo irresoluto, cuando chocan pero también cuando convergen, cuando el camino no acaba sino solo comienza para convertirse en otra opción.

Nos vamos satisfechas de haber visitado la muestra, orgullosas de saber que el trabajo de un artista guatemalteco es reconocido más allá de nuestras fronteras y quizás mejor que dentro de ellas. Nos vamos para que comience el desmontaje y nuestra participación en el II Encuentro.

 

 

Itziar Sagone
/

Mujer, madre, hermana, amiga, compañera. Disfruta la vida trabajando desde el arte, la educación, las comunicaciones y la sanación alternativa en la construcción de un país en el que podamos vernos y reconocernos, en el que avancemos en colectivo hacia formas más humanas de relacionamiento. Ama caminar por el bosque y vibrar con él desde dentro.


Hay Mucho Más

1

COMENTARIOS

RESPUESTAS

    popol-mayab.org /

    28/12/2015 2:41 AM

    Este artículo es una muestra palpable que a la autora le valen cebo los idiomas mayas. Eso sin mencionar la banalidad del "harte" conceptual.

    ¡Ay no!

    ¡Nítido!



Secciones