Un hombre sueña, y al hacerlo rompe sus propias cadenas. Soy un error en el sistema, un hombre distinto, un hombre que renunció a ser machista. Desde este que es mi nuevo lugar en el mundo, escribo: dejen de tratarme como objeto.
Los hombres estamos cansados de ser cosificados como bancos o monederos que están siempre dispuestos a pagar las cosas de nuestras compañeras. El movimiento de feministos masculinistas ha puesto el limón de los cuestionamientos sobre la herida de nuestra cosificación en este sentido pero se ha olvidado de que, del mismo modo que el matriarcado machista nos mira como bancos, también podemos ser objetos románticos
Esto sucede sobre todo en las relaciones de pareja en las que se nos obliga a seguir una serie de reglas patriarcales de afecto cuando nosotros sólo queremos nuestra libertad de poder seguir saliendo con más niñas. En mi caso, por ejemplo, he tenido incluso que mentir, que decir “tú eres la única” sabiendo que estoy siendo obligado por el patriarcado a mentir si quiero relacionarme sexoafectivamente con una niña.
Es trágico y horrible a la vez. Los feministos debemos tomar la batuta en el movimiento anti patriarcal para terminar con este doble estándar. No queremos tener que escondernos para salir con muchas mujeres al mismo tiempo, pero tampoco queremos que ustedes salgan con otros hombres, y es en esta contradicción dolorosa que está nuestro sino adverso, trágico como feministos masculinistas. Por eso nos vemos obligados a mentir, y mentir nos daña, nos duele, nos hiere profundamente a nosotros los hombres cosificados. Dejen de hacernos mentir. Lo exigimos ahora.
Basta de cosificación masculina
No somos objetos
Somos sujetos
teo /
hermoso lo que hacen.
en perspectiva /
#TestDelAliadoFeminista en Twitter
Hugo /
En nomada ahora escriben comics o que?
Busquen a gente que realmente tenga algo serio que decir.