“La indignación se siente en el estómago” y otras consignas del segundo sábado de protestas

“Respiro en el ambiente y siento desesperanza profunda”, dijo Lucía Ixchiú, una mujer indígena activista que con la mascarilla puesta y los ojos llenos de lágrimas, participó en la manifestación convocada por la agrupación Gente Positiva. 

Alrededor de ella y con instrucciones de respetar la distancia social, habían aproximadamente 100 personas portando carteles con diferentes denuncias y demandas para el gobierno. Lucía llegó porque en medio de la crisis sanitaria los recursos económicos del Estado no están llegando a las personas más necesitadas. 

“En serio pensé que en medio de una pandemia mundial los gobernantes iban a entender un poco, que iban a tener más sentido común pero definitivamente no les interesa la gente. Hoy vemos en la plaza a gente que no tiene comida y para quienes sí tenemos que compartir y que ser solidarios y la organización popular es lo único que nos queda”, dijo al ser entrevistada. 

Ixchiú espera que el efecto de las manifestaciones sea que más personas comprendan que permanecer en casa es un privilegio en un país pobre como Guatemala. 

“Ya hemos visto movilizaciones en Quiché y Cobán. Queda la esperanza de que la indignación siga corriendo porque ya no es solo un discurso, mucha gente ya la siente en el estómago. Es el hambre, es la pobreza”, enfatizó.

A la misma hora de la protesta, La Olla Comunitaria, una organización que a través de donaciones reparte alimentos en la Plaza Central para personas sin hogar o con escasos recursos, estaban distribuyendo bebidas y alimentos a una larga fila de personas. Como ha sucedido todos los días desde el inicio de la pandemia. 

Emilio Molina, voluntario de La Olla Comunitaria, dijo que las donaciones que les permiten entregar alimentos a las personas más necesitadas, cada vez son más escasas, tanto que hay días en que los platos son solo frijoles y arroz. #GuatemalaTieneHambre es el nombre de la campaña para donar a esta organización. Acá los enlaces para contribuir a la causa: 

¿Dónde está el dinero?

Estudiantes de la Universidad Rafael Landívar y la Universidad San Carlos, fueron parte de la reunión. Laura Aguiar, Secretaria General de la Asociación de Estudiantes Oliverio Castañeda de León, reclamó que mientras los contagios de coronavirus aumentan el Estado no está utilizando los rercusos de forma adecuada, que el Bono Familia no está llegando a todas las personas que lo necesitan y que el personal médico no está siendo abastecido. 

“Muchos critican estas movilizaciones porque son “innecesarias”, pero cómo no hacer nada ante estos préstamos millonarios desaparecidos ante esa enorme cantidad de gente que está muriendo”, enfatizó Aguiera. 

“¿Cómo podemos no hacer nada?” dice @_aguiarlaura, actual secretaria general de la @AEU_OliverioCDL, refiriéndose a las movilizaciones y acciones de calle convocadas. "Guatemala tiene hambre, lo vemos en la plaza, lo vemos en las calles...", enfatiza.

Video: @JodyNomada pic.twitter.com/kq8LuuTmFo

— nómada (@nomadagt) August 22, 2020

Una de las preocupaciones más grandes de los estudiantes es que esta crisis sanitaria y económica incremente la brecha de desigualdad en Guatemala.

“Dejen en paz a Juan Francisco Sandoval”

Una crisis lleva a la otra. En la segunda manifestación durante la pandemia por COVID-19, también hubo denuncias contra los intentos de grupos corruptos que están atacando a los magistrados de la Corte de Constitucionalidad, a Jordán Rodas, Procurador de los Derechos Humanos y al fiscal Juan Francisco Sandoval. 

“Dejen en paz al fiscal”, se leía entre los carteles. Sandoval acumula ya más de 30 denuncias en su contra. Esos casos se acumulan en la Fiscalía de Asuntos Internos mientras en la plaza se remomoraba que hace cinco años él fue parte del equipo del Ministerio Público y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), que pidió la orden de captura contra la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, por el caso La Línea.

Un representante del Comité Campesino del Altiplano (CCDA), dijo en el micrófono en medio de la plaza que durante la crisis sanitaria también ha aumentado las agresiones contra las comunidades, como la evidenciada en la comunidad Cubilgüitz, Alta Verazpaz, que fue desalojada de forma violenta e ilegal. La aldea, como 1 mil 400 comunidades más, está atravesando un conflicto agrario. 

[Esto te dará contexto: “Hay desalojos ilegales auspiciados por el sistema judicial”, afirma abogado. Por Jody García]