Los guatemaltecos, después de las dictaduras, crecimos desde 1985 creyendo que las elecciones eran el mecanismo más poderoso para sacar del poder a los gobernantes corruptos y mediocres. Tanto que ningún partido en el poder ha repetido en la Presidencia, como no ha sucedido en ningún país de América Latina. Tanto que el actual Congreso (2012-2015) fue una renovación profunda: 70% de los diputados anteriores no se reeligieron. Estas evidencias sustentaban el mito nacional de la democracia electoral.
Pero es muy poco sistema electoral para los sueños y las demandas del movimiento ciudadano contra la corrupción, contra la impunidad y por un mejor país para nuestros hijos.
El modelo electoral es un mito. El voto no ha empoderado a la ciudadanía. Ni al Estado. Ni hecho sentir a los políticos que tienen un contrapeso en la calle. Los hizo adaptarse e ir migrando de partido en partido. Los mismos que hicieron gobierno con el empresarial y elitista Óscar Berger ahora están con el populista y transa de Manuel Baldizón, uno de los tres que encabezan las encuestas. Baldizón llegó a la pantalla nacional con el partido que fundó la socialdemócrata de derecha Sandra Torres, otra de las tres. Y los exmilitares radicales y los grandes empresarios conservadores que antes apoyaron al expresidente y convicto Otto Pérez, ahora apoyan a Jimmy Morales, el tercero.
1. ¿Por qué las elecciones no son la solución al problema?
Como todas las personas y las sociedades tenemos poca información disponible, explicamos parte de la realidad con base en mitos. Uno de los mitos es que para que la democracia funcione, debe haber elecciones el 6 de septiembre y debe haber un cambio de gobierno el 14 de enero. No es cierto. Esas son unas reglas escritas en 1985 y que siempre tienen excepciones. Sobre todo cuando el sistema democrático fue secuestrado y la ciudadanía está exigiendo su liberación. La ciudadanía y una fiscalía junto a la CICIG, que tienen en la cárcel y en tribunales a toda la cúpula del gobierno de Pérez y Baldetti y a toda la cúpula del partido de Baldizón.
Pero bueno, la mayoría conservadora del Tribunal Supremo Electoral y de la Corte de Constitucionalidad decidieron que hubiera elecciones este domingo. Con todo y que el sistema es una lavandería de dinero de grandes empresarios tradicionales, políticos corruptos y narcos –según la misma CICIG–.
Las elecciones no son la solución al problema porque el domingo no sólo se elegirá Presidente sino que también se renovará el Congreso con 158 diputados.
Las encuestas dicen que el partido con más votos será el partido Líder, de Manuel Baldizón que, en su gran mayoría, es una banda de corruptos. Los cálculos que se mueven entre los partidos políticos, la patronal y en la revista ContraPoder es que Líder tiene una estructura tan sólida de alcaldes movilizadores de votantes que obtendrá entre 40 diputados y 80 diputados (la mitad del Congreso). Sí, el 14 de enero, habrá entre el 25% y un 51% de diputados de Manuel Baldizón.
Pero no sólo el 25-51% de diputados de Baldizón llegarán al Congreso con la intención de recuperar la inversión millonaria en sus candidaturas vía corrupción. Un buen porcentaje del resto de diputados de otros partidos también llegará al Congreso para hacer dinero o pagar favores a grandes empresas.
Porque así está diseñado el sistema político guatemalteco. El podrido sistema político guatemalteco. Y todos lo sabemos.
Eso sí, habrá una minoría de diputados, de partidos pequeños o dentro de los partidos grandes, que intentará ser contrapeso y llevar adelante las reformas que necesita el país: en materia de financiamiento y competencia electoral, en materia de justicia, en materia de privilegios fiscales, en tanto que necesita el país.
2. ¿Por qué pueden evitar lo peor?
A mí me parece que en estas condiciones no debería haber elecciones. Son una lavandería de corrupción y privilegios estatales. Y no se cumplió la ley electoral. Ningún partido con posibilidades contó quiénes son todos sus financistas, y Líder hizo campaña anticipada desde febrero de 2012 –y sólo estaba permitido desde el 2 de mayo de 2015.
Pero voy a ir a votar. Porque aunque me parece que Sandra Torres tiene muchos méritos pero muchos cuestionamientos en su pasado, y me parece que Jimmy Morales no tiene nada y se alió de socios de este sistema de corrupción e impunidad, a pesar de eso, me parece que hay una amenaza mucho mayor para la democracia: Manuel Baldizón.
Como hemos evidenciado en Nómada desde que nacimos en agosto de 2014, Baldizón representa la esencia del sistema de corrupción e impunidad. Las transas, las justificaciones, el todo-vale, el atajo, el autoritarismo, la mentira. Y además, intentará poner fin a la CICIG y odia al movimiento ciudadano.
Por eso, lo mejor para la reforma del sistema, para el fin del sistema, será terminar la carrera política de Baldizón en las urnas (y luego en los tribunales). Ahora que están en un triple empate técnico en las encuestas Baldizón, Jimmy y Sandra, sería de ensueño que los votantes urbanos pudieran decantarse por Sandra y Jimmy. Para presidenciales no sirve tanto votar por minorías.
Y pueden evitar lo peor porque pueden hacer que Baldizón no tenga una mayoría parlamentaria. Para diputados sí cuenta votar por minorías, porque nuestro sistema electoral favorece a las minorías, aunque tengan menos porcentajes.
Aquí me parece que hay muchas opciones para diputados. Porque éste es un análisis con opinión. Y escribo tres ejemplos: En la Ciudad de Guatemala, el partido Todos tiene como candidato a Javier Monterroso –exsecretario privado de la fiscal Claudia Paz–; en el Listado Nacional, Amílcar Pop, de Winaq, ha sido el mejor fiscalizador del gobierno de Pérez Molina; Nineth Montenegro, de Encuentro por Guatemala, es una autoridad en el pleno y logró evitar que Pérez Molina y Baldizón se salieran con la suya; y en el Congreso me parece que la UNE ha sido una bancada sólida. Y CREO tuvo buenas actuaciones en momentos clave. Convergencia tiene algunas candidaturas interesantes. Hay opciones. Minoritarias pero opciones.
Esas minorías parlamentarias van a ser cruciales del otro lado de la frontera del 14 de enero de 2016, cuando se necesitará de mucha CICIG-MP, de muchos jueces y de muchas movilizaciones ciudadanas para seguir enterrando el sistema de corrupción e impunidad.
Seguirlo enterrando para que sigan naciendo flores en esta primavera guatemalteca.
Julio Revolorio /
Varias inexactitudes y sesgos.
Primero, elecciones 1985, no fueron contra la corrupción. Fue un procedimiento de transición hacia la culminación de la guerra. Eso si, abrió las puertas a la corrupción y al crimen organizado, narcotráfico, a través de la clase política en sus distintas épocas hasta el presente.
Segundo, la UNE, no es de derecha y, acá, la disertación denota un claro esfuerzo por inmacular a la izquierda.
Cabe mencionar que el 90% de su plana fueron y son parte de la estructura guerrillera.
Gustavo /
No entiendo este sistema. Por un lado me dice que si voto no elijo. Por otro, me extorsiona diciéndome que si no voto, elijo al "más peor"...
Gabriela /
Estoy de acuerdo en algunos aspectos pero no me parece que este incitando o diciendo que es mejor votar por los candidatos que van a la presidencia que estan en los primeros lugares, cada quien tiene que votar segun sus ideales
R Ponciano /
Rosa, me parece que Martín está arengando a participar, no haciendo un análisis social, histórico y político profundo de la situación. El texto es en realidad un editorial, dirigido al lector medio, no al académico. Ya habrá tiempo para hacer los análisis en profundidad, ahora está optando por dejar clara su posición ante el inminente evento electoral.
Rosa Lux E /
Martín, tenés muy interesantes opiniones y sos muy bueno para exponerlas, por escrito al menos, jejeje. Sin embargo, y con toda honestidad y respeto, me parece que no tenés los suficientes elementos teóricos para explicar lo que sucede en Guatemala, más allá de lo obvio. Lo que trato de decir es que tu conocimiento puede impresionar a una periodista inglesa que igual podría estar cubriendo una plaga de langostas en Madagascar o el nacimiento de sextillizos en Laos, pero a quienes interesa lo que sucede en Guatemala nos deja con una sensación de insaciedad informativa.
En lo personal me gustaría leer a Luis Solano explicando cuáles son los reacomodos en los bloques histórico y hegemónico guatemaltecos a la luz de los recientes eventos, si se está dando un reacomodo o desplazamiento entre dirigencia y dominio, etc., etc.. Quizás te costaría soltar unos lenes extras, pero creo que valdría la pena y los lectores te lo agradeceríamos infinitamente.
Mi Vaticinio para mañana sin mayor estudio que el instinto y el poco conocimiento que tengo para hilar algunas cosillas.
8.2 pueden votar
5,417,678 van a votar.
Presidente, lo que al final importa en un sistema presidencialista.
Aunque los diputados sean muy importantes.
LÍDER MANUEL BALDIZON 1.234.000
BLANCOS 534,000 NULOS 334,000 = 868,000
UNE SANDRA TORRES 756,000
FCN JIMMY MORALES 623,000
VIVA ZURY RÍOS 487,000
CREO ROBERTO GONZÁLEZ 444,000
PAN JUAN GUTIÉRREZ 345,000 MI VOTO VA PARA EL
UCN MARIO ESTRADA 275,000
TODOS LIZARDO SOSA 123,000
FUERZA 85,000
ENCUENTRO 66,000
PRI 46,000
WINAQ 34,000
PARTIDO PATRIOTA 17,000
MNR 14,678
Margen de error el 100 por ciento pero me entretuve y me atreví.
NO LE COPIE A NINGUNA ENCUESTA PERO ME AYUDE DE LAS TAN DIVERSAS ENCUENTAS QUE SALIERON AL FINAL, ESPECIALMENTE LA DE PRENSA LIBRE.
Bueno, me gusto.
Lo que no entiendo es en el primer parrafo, ningún partido a repetido en el poder en Latinoamérica. Sobran partidos que repiten FPV, PRI, PAN, ARENA, LOS SANDINISTAS ETC ETC.
GRACIAS, por lo de la misma gente de Berger apoya a BALDIZON, por fin alguien lo aclara. :)