Qué pasó con el incendio (que fue enorme) opacado por las mentiras del ministro de Ambiente

Un pirómano provocó un incendio en Teculután (Zacapa) el 14 de abril. El fuego se extendió durante cuatro días más. En total, se perdieron unas 134 hectáreas de bosques de la Reserva de la Biósfera de la Sierra de las Minas. La extensión arrasada equivale a unas 150 veces el espacio que ocupa el Palacio Nacional de la Cultura.

En Teculután, un municipio a 120 kilómetros de la capital, rodeado de bosque, AmBev tiene una embotelladora porque el agua de la zona está muy poco contaminada. Pero la Reserva está en riesgo permanente por los incendios forestales provocados.

La Sierra de las Minas ocupa más de 200,000 hectáreas, entre cinco departamentos. Hasta abril, se reportaron 167 incendios en áreas protegidas de todo el país, afectando aproximadamente 1600 hectáreas. Y la zona más afectada es La Sierra de las Minas. Pero el incendio de Teculután quedó solapado por una mentira política.

El helicóptero es primero

Desde el 23 de abril, el ministro de Ambiente, Luis Alonzo, lleva dos citaciones y una interpelación en el Congreso. Todo porque usó un helicóptero privado el 15 de abril para ir a Santiago Sacatepéquez a votar en la consulta popular sobre  si una Corte Internacional evalúa el diferendo territorial entre Guatemala y Belice. Y él añadió que fue primero a sobrevolar la Sierra de las Minas. Pero no era cierto. Toda una historia de engaños que cubre un problema ambiental

En la primera citación parlamentaria, el ministro defendió que pagó el vuelo de su dinero y que sí fue a ver los efectos del fuego en Teculután. Pero ayer cambió su versión inicial cuando dijo que no necesariamente sobrevoló el área afectada. Eso sí, informó de que de que la renta del transporte le costó  Q12,500.

En la sesión del miércoles 31 de mayo, la diputada Delia Back cuestionó al funcionario sobre sus capacidades para dirigir la cartera de Ambiente, porque el ministro se licenció en periodismo este año. A eso, Alonso respondió que no necesitaba experiencia porque su cargo es político, y no técnico.

Uno del 26%

El ministro declaró en el Congreso que el 15 de abril contrató los servicios de un piloto y un helicóptero para sobrevolar el área afectada por un incendio forestal en la Sierra de las Minas. Según el relato del funcionario, el piloto salió del Aeropuerto La Aurora, en la Capital, y recogió al ministro y otras dos personas en Teculután. Dijo que, aprovechando que ya habían contratado el vuelo privado, el helicóptero los llevó a Santiago Sacatepequez. Apenas fue un 26% de la población votó aquel día en la consulta. Y entre ellos, estuvo el ministro de Ambiente, que fue fotografiado por El Gráfico de Sacatepéquez.

La foto del ministro viajando en helicóptero empezó a dar vueltas en noticias y redes sociales a los pocos días de su presunta supervisión de un fuego que afectó a Teculutan, pero que nunca realizó. El 23 de abril, el gran reto de Alonzo era explicar frente a un grupo de congresistas por qué un ministro no podía ir a votar en su carro. Entonces provocó la polémica: dijo que el vuelo era para supervisar los daños de un incendio y su paso por Sacatepéquez no estaba programado.

Dos diputadas demostraron su primera falacia. Alejandra Carrillo, ex integrante del Movimiento Reformador y ahora independiente, y Eva Monte, de Alianza Ciudadana, fueron quienes no le creyeron. Consiguieron comprobar que el ministro mentía. Primero, el plan de vuelo del helicóptero con matrícula TG-HRP no establecía un sobrevuelo por la Sierra de las Minas. Y segundo, con una declaración jurada del piloto Christian Rudeke Braun Valle se determinó que no hubo una supervisión de un incendio. Esa fue solo una excusa para ir en un helicóptero privado a votar en la consulta popular sobre Belice en su pueblo.

Pero las mentiras siguieron. El diputado Carlos Barreda, de la UNE, cuestionó a Alonzo por qué uso un helicóptero privado de una empresa que entre su giro de negocios no está el servicio de rentas de aeronaves. La Dirección General de Aeronautica Civil registró ese helicóptero como propiedad de la offshore Ulmaria Trading Corp., pero realmente está en posesión de Proyecto de Desarrollo Integral Pontilá S. A.  

Esa empresa desarrolla un proyecto hidroeléctrico que pone en riesgo la laguna Lachuá, en Alta Verapaz, que fue aprobado por el Ministerio de Ambiente. Alonzo dijo que no sabía de quién era el helicóptero, aunque después sí reconoció que conocía a la empresa y al piloto.

Aún se desconoce quién provocó el incendio de Teculutan. En general, no se sabe los nombres de quiénes son los responsables de provocar esos incendios, porque no hay capturas por esos delitos. Pero sí hay indicios de sus intenciones. Los depredadores forestales se benefician cuando hay fuego, porque así pueden cortar árboles de maderas preciosas y extraerlas de los bosques evadiendo los controles de los guardabosques.  

En otros casos, los invasores de las áreas protegidas queman los terrenos para luego sembrar la tierra o criar ganado, y eso se convierte en un negocio muy lucrativo. Y también están los grupos criminales, que necesitan despejar las áreas boscosas para movilizarse a través de las montañas sin ser detectados por las autoridades.

-Esto nos afecta a todos y de todas las formas que uno se pueda imaginar, pero pareciera que a las instituciones no les interesa, reclama Gustavo Vargas, concejal en la Municipalidad de Teculután, quien además preside la Comisión de Protección de la Subcuenca del Río Teculután, en ese municipio.

Los roces y los engaños

Del incendio en Teculután ningún político volvió a hablar. Las mentiras del ministro a los diputados provocaron roces. Y esos roces llevaron Alonzo directo a una interpelación. Diputados de cinco bancadas, aliados de la bancada oficialista FCN en otras ocasiones, pidieron el juicio político para el ministro.

Tras cuatro interrogatorios, Alonzo solo consiguió confundir más a los diputados y cambiar su versión de los hechos. En la última jornada dijo que había sobrevolado ‘las faldas de la Sierra de las Minas’ y que no había sido un incendio.

Los diputados deben decidir el 5 de junio si le dan el voto de falta de confianza al ministro. Si consiguen 105 votos, Alonzo tendrá que presentarle su renuncia al presidente Jimmy Morales. Carrillo cree que el funcionario debe dimitir, no solo por mentir, sino porque fue indiferente ante un incendio en un área protegida. ‘Si bien todo el lío político empezó porque nos dimos cuentas de sus mentiras, al final esto pone al descubierto que el ministro no está haciendo su trabajo’.

Otro incendio ocurrió en Teculután el 15 de mayo. El Ministerio de Ambiente no se ha movilizado a inspeccionar los daños. Tras el último fuego provocado, no hubo renta de helicóptero y tampoco sobrevuelo.