La declaración de probidad de Baldetti confirma sospechas, defensas y deja vacíos

En el encabezado de la hoja se lee en mayúsculas: Ampliación. El documento tiene el número de registro 107595 de la Contraloría General de Cuentas y el Nit 417928-5. Es el formulario de ampliación de patrimonio de Roxana Baldetti, la ex vicepresidenta investigada por enriquecimiento ilícito por casos de corrupción. Su declaración jurada patrimonial hasta el momento estaba bajo llave. Cuando asumió como “la vicepresidenta anticorrupción” ofreció hacerla pública. Pero no lo hizo.

Tampoco lo lograron sus enemigos del sector privado organizado cuando se la pidieron a ella y al presidente Pérez Molina. Tampoco cuando la oenegé Acción Ciudadana recaudó 3 mil firmas para que ella y el presidente divulgaran la información de sus bienes como una muestra de transparencia. No lo hicieron. Ninguno de los dos. Argumentaron que el artículo 21 de la Ley de Probidad les protegía con esa confidencialidad.

Nómada pudo verificar las últimas tres actualizaciones de la declaración patrimonial de Roxana Baldetti. 2013, 2014 y 2015. La Ley de Probidad detalla que este documento es una consignación de los bienes, derechos y obligaciones de los funcionarios públicos, para quienes también es un requisito para optar al ejercicio de un cargo. Desde que es diputada, la ex vicepresidenta la ha ampliado en 11 ocasiones, una cada año. Es delito no declarar cuando amplía su patrimonio.

Entre los principales hallazgos están los siguientes.

Sí, es dueña del hotel en la Antigua que había empezado a dirigir una de sus mejores amigas.

Sí, es dueña de centros comerciales como ella decía en discursos públicos para explicar su súbita prosperidad.

No, no declaró todas sus propiedades, como la mansión de la playa en Marina del Sur.

Qué dicen las hojas de su declaración entre 2013 y 2015

En la declaración presentada el 31 de enero del año 2013, un año después de asumir la Vicepresidencia, la entonces subjefa de Estado declaró, entre otros datos, que tiene una cuenta en un banco de Estados Unidos donde contaba con depósitos a largo plazo por US$20 mil (Q160 mil), equivalentes a más de su sueldo de un mes. Además, indica que es dueña de 6 mil acciones de Q100 cada una, pero no detalla la empresa. También registra un préstamo con Banrural por Q4 millones.

Para su segunda actualización como vicepresidente, el 31 de enero del 2014, declaró la compra de una propiedad en la Colonia Asunción, en la zona 5, por un monto de Q50 mil. Según consultas en el Registro de la Propiedad, el inmueble adquirido por Baldetti tiene un área de 180 metros cuadrados, una casa relativamente pequeña para la líder del Partido Patriota.

El 11 de junio, la Unidad de Extinción de Dominio pidió el embargo de esta y otras dos propiedades a nombre de la ex mandataria porque el MP y la CICIG la investigan por el caso La Línea en la SAT, donde su ex secretario privado, Juan Carlos Monzón, está acusado de liderar una red dedicada a la defraudación aduanera.

Ese año, Baldetti consignó ser propietaria de 60 acciones de Q1 mil de la empresa Inversiones Galu, S.A., y de 20 acciones por el mismo valor en Proyectos Rentables de Inversión, Sociedad Anónima (Proinver).

Inversiones Galu, S.A. es la propietaria del Hotel Mansión de la Luz en Antigua. Éste es dirigido por Vivian Urízar, una de las mejores amigas de la ex vicemandataria, según había denunciado elPeriódico. Ante la Contraloría, Baldetti reconoció su parte de las acciones.

En su tercera ampliación, el 30 de enero de este 2015, Baldetti reportó un nuevo aumento en su declaración patrimonial en relación a Inversiones Galu. Ahora posee 220 acciones, alcanzando un valor de Q220 mil.

Por otro lado, Baldetti es accionista del 40 por ciento de la empresa Proinver, dedica a la elaboración de planos para construcción de centros comerciales y proyectos habitacionales. Esta sociedad anónima fue allanada por el Ministerio Público el 30 de junio pasado.

En su última declaración patrimonial, también declara haber obtenido un préstamo con Banrural por Q4 millones, y depósitos en una cuenta a largo plazo por Q1 millón. A la misma cuenta en el año 2012 transfirió Q614 mil, y en el 2013 Q784 mil.

Como vicepresidenta, Baldetti recibía un salario mensual de Q136 mil. Q1.9 millones anuales. Como diputada –su trabajo desde 2004 hasta 2011–, su salario era de Q29 mil mensuales. Q0.4 millones anuales.

El sistema de alertas que no funcionó

Entre el sistema bancario, la Superintendencia de Bancos y el Ministerio Público tienen un sistemas de controles para alertar cuando la fortuna de una persona políticamente expuesta (PEP) está aumentando su patrimonio sin relación a su salario. Como en el caso de una diputada (2004-2011) y vicepresidente (2012-2015) sospechosa de corrupción. Pero el sistema no parece haber reaccionado a tiempo.

La Superintendencia de Bancos presentó (hasta el 22 de mayo de 2015) un reporte de transacciones sospechosas de Baldetti y su esposo en los bancos G&Tcontinental y Banrural, de 2014 y 2004, respectivamente.

El Banco G&T reportó que la cuenta a nombre de Baldetti consignó dos operaciones consideradas sospechosas. Una de ellas fue un depósito que se realizó el 20 de agosto de 2014 por un valor de Q2.9 millones. Dos días después se realizó otro depósito por Q1.9 millones.

Ambos depósitos se realizaron desde la cuenta de Proinver, la empresa de la pareja Baldetti, de centros comerciales. Esas dos transacciones fueron reportadas por el banco como un movimiento inusual y se elaboró el documento No. 174A-2014. Sin embargo, fueron archivadas porque Baldetti, a través de su ex secretario privado, Juan Carlos Monzón, presentó una documentación de respaldo. Aseguró que esos dos movimientos, que suman Q4.8 millones, eran las ganancias de su empresa.

La credibilidad pública de Monzón quedó hecha trizas después de que una investigación del MP y la CICIG lo colocara como cabecilla de una red de desfalco aduanero.

Banrural pide el pago de préstamos

Junto a G&T, otro de los bancos del sistema en los que Baldetti tenía cuentas (Banrural) también presentó un aviso de movimiento sospechoso. Aunque fuera de 2004. Una transacción de Q500,000 del esposo de Baldetti, Mariano Paz.

Al ver el escándalo y el embargo de bienes de Baldetti, Banrural empezó el intento por cobrar a Baldetti los préstamos por Q28 millones que le hizo.

El 10 y el 16 de junio del 2015, la notaria de la entidad, Rosa María Chavarría Orozco, visitó la oficina de Proinver, la empresa de Baldetti y su esposo, para requerir el pago de dos créditos. Uno por Q24 millones 530 mil 425 a nombre de su empresa, y otro por Q3 millones 227 mil a título propio.

El préstamo a nombre de Proinver, según la información, fue destinado para adquirir las acciones de la empresa Megaplaza, S.A., entregando como fideicomiso de garantía la empresa Proinver. Esto ocurrió el 30 de septiembre del 2014. Megaplaza, S.A. es dueña del centro comercial del mismo nombre ubicado en el kilómetro 140 carretera hacia el Atlántico, en Estanzuela, Zacapa, valuado en Q22.8 millones.

Las opciones de Baldetti: enriquecimiento ilícito o evasión de impuestos

El patrimonio de Baldetti es gigante para los ingresos de un funcionario público. En su defensa, Baldetti asegura que ella y su marido son empresarios prósperos. Pero todavía hay algo que no cuadra.

Una de la más grandes propiedades adquiridas por la familia Paz Baldetti fue la finca La Montagna, ubicada en Tecpán, municipio de Chimaltenango. Cuenta con una extensión de 114 mil metros cuadrados y está divida en ocho fincas, que costaron precios “simbólicos” que suman Q2.9 mil. El valor declarado al Estado es el valor por el que pagaron el IVA y por el que pagan el Impuesto Único Sobre Inmueble.

Otra de las propiedades más costosas de los Baldetti Paz fue en el lugar más exclusivo de las playas guatemaltecas. Una urbanización construida con arena blanca del Caribe y en el que tienen propiedades personajes como el cantautor Ricardo Arjona. Se trata de Marina del Sur en el Pacífico. Un inmueble que Baldetti no registró en las actualizaciones de la declaración patrimonial a las que tuvo acceso Nómada.

La propiedad de Baldetti tiene una extensión de 1,798,0650 metros cuadrados. Luego de cambiar dos veces de proveedor, el 7 de febrero de 2011 Baldetti compró el inmueble por Q456 mil 700, según su declaración ante el Estado. Pero en páginas de bienes raíces en internet, una propiedad sencilla en Marina del Sur cuesta diez veces más, unos Q5 millones.

La diferencia entre el valor real y el valor declarado al fisco podría constituir el delito de lavado de dinero por subvaloración de bienes, explicó Ana Elena Guzmán, jefa de la fiscalía de delitos económicos del MP, sin hacer referencia a este caso en particular.

El abogado de Baldetti, Mario Cano, asegura que no incumplieron ninguna ley al no declarar el valor total de las propiedades. Defiende, además, que no hubo lavado de dinero ni enriquecimiento ilícito.

Tendrán que demostrarlo en un juicio.