El pasado 22 de abril el abogado Esteban Celada estaba atendiendo una audiencia en un juzgado fuera de la Ciudad de Guatemala, donde reside. Al regresar a su casa se encontró con una escena de horror: personas desconocidas forzaron la puerta, ingresaron mientras él no estaba y destrozaron todos los ambientes de la vivienda. No se robaron nada.
No es la primera vez que Celada sufre un allanamiento ilegal. El primero ocurrió en noviembre de 2018, cuando notó que sujetos ingresaron a la residencia y revisaron expedientes de los casos en los que participa. Un segundo intento se reportó en febrero pasado, cuando encontró la puerta de su casa forzada y abollada.
El abogado conoce casos relacionados a violaciones de derechos humanos durante el conflicto armado interno y es parte del equipo legal de Mujeres Transformando el Mundo (MTM), una entidad que representa a mujeres víctimas de violencia. Destaca su participación en el caso por la tragedia ocurrida en el Hogar estatal Vírgen de la Asunción y en el juicio por la desaparición del niño Marco Antonio Molina Theissen.
[Esto te dará contexto: Abogado de los casos Hogar Seguro y Molina Theissen ha recibido 31 amenazas en dos años]
En los últimos dos años ha sufrido 39 agresiones y amenazas. Aunque los ataques han escalado en constancia y violencia, las denuncias del abogado no han avanzado en el Ministerio Público y sus peticiones de medidas de seguridad siguen en trámite.
En esta entrevista explica lo que pasó desde el último reporte.
¿Qué ha pasado después de la denuncia por el allanamiento en su residencia?
Hubo bastantes reacciones, pero en esta ocasión más en el plano internacional que nacional. En Guatemala tuve en un inicio el acompañamiento y asesoría de la Defensoría de Derechos Humanos (de la Procuraduría de Derechos Humanos), por medio de la licenciada Ruth del Valle,quién estuvo muy al pendiente y me acompañó a poner la denuncia. Ella también realizó varias entrevistas y comunicaciones conmigo porque ya se había percatado de la necesidad de pedir medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. De mi parte hubo varias solicitudes de protección en el sistema interno (de Guatemala) y no he recibido respuesta desde 2016.
¿Qué pasó con el trámite de la denuncia en la PDH?
La defensora hizo la solicitud, preparó el expediente, estábamos en comunicación y se pasó a la Unidad de Investigación de la Procuraduría de los Derechos Humanos. La respuesta fue que la persona encargada de esa unidad se negó a firmar la solicitud y enviarla a la CIDH argumentando que no se habían agotado los procedimientos internos. Se me hizo como haberme topado con un muro de nuevo, solo que esta vez ante la PDH al tener esa respuesta.
¿Otras organizaciones acompañaron su solicitud ante la CIDH?
Tuve el acompañamiento tanto de Acoguate como de UDEFEGUA (Unidad de Protectores y Protectoras de Derechos Humanos de Guatemala). Esta última organización hace la solicitud a la CIDH y ahora estamos a la espera de la respuesta.
¿Cómo afecta a su seguridad que todavía no haya una respuesta?
He de decir que ante el inminente inicio del juicio del caso del Hogar Seguro, estaba muy preocupado por la seguridad. Si hubiera empezado el 6 de mayo, como estaba programado, yo estaba pensando en cómo haber hacer para gestionarme mis propios mecanismos de seguridad. La verdad es que, a cómo está la situación, muchas veces no tenemos ni siquiera dinero para terminar de suplir nuestras necesidades fundamentales. En mi caso siento que la seguridad es elemental, porque sin eso no puedo hacer mi trabajo y si no trabajo no puedo subsistir porque no hay ninguna ayuda.
La PDH responde
Rina Mazariegos, de la Unidad de Investigación de la PDH, respondió a Nómada que no se negó a firmar la petición de medidas cautelares a favor del abogado Celada y que el expediente sigue en trámite.
Nos hemos tardado un poco en enviar la (solicitud) de medidas cautelares para asegurar que la Comisión Interamericana no las rechace.
Mazariegos agregó que hubo retrasos en el análisis de riesgo del caso de Celada, una gestión que debe ser realizada por la Policía Nacional Civil. Según señala, la crisis del coronavirus ha provocado que las gestiones tomen más tiempo, incluso la búsqueda de referencias sobre los casos en los que el abogado ha participado.
Udefegua reporta que hasta el 20 de abril de este año recibió 157 denuncias por agresiones en contra de todo tipo de defensores de derechos humanos. El año pasado la cifra llegó hasta 467. Entre los casos se cuentan allanamientos ilegales, desalojos violentos, intentos de asesinato y detenciones sin sustento jurídico.
Marcos Miralvalle /
Estoy seguro que el MALDITO PAYASO y sus secuaces estan haciendo esas ilegalidades, per pronto caerán y recibiran todo su merecido, ojala pronto tambien caiga el MALDITO PAYASO DE MORALESJAS el y sus compinches llamese Anahi keller, Degenhart y el resto de criminales que andan sueltos pronto estarán en el bote no lo dudo !!!