Engler García
Quise ser locutor profesional y no pude, pero fue en una cabina donde aprendí lo que sé de redactar. Abrí un blog para contar lo que veía. Después escribí en Plaza Pública, en un libro y ahora también en Nómada.


El machismo, don José y cuatro presidiarios cruzando una tarde fría
Engler García / 11 diciembre, 2019
Don José me habló al salir de la oficina, en el parqueo de la empresa cuando yo ya me iba a casa. Siempre que salgo por la puerta, levanto la vista para ver al cielo, casi como un acto reflejo. Excepto cuando don José está en la puerta, atento a los movimientos en el parqueo y cuidando los vehículos estacionados, porque entonces intentará hablar. Así que me quité el audífono para escucharle.

Perros de ciudad
Engler García / 21 noviembre, 2019
Tres perros revolotean alrededor de una adolescente que espera a que abran la escuela secundaria que está cerca de mi casa. Son estos los días donde solo van los que han perdido algo, la esperanza quizá. O bueno, tal vez solo el interés en medio de un sistema educativo atroz. Pero pensándolo bien, no todo tiene por qué ser tan dramático, quizás solo haya perdido un curso por un par de puntos.

Pájaros de ciudad
Engler García / 11 octubre, 2019
La luz de las ocho de la mañana se parece a la de las cuatro de la tarde. O al menos en cómo rebota sobre los objetos más artificiales de esta jungla y sobre los rostros que la caminan. Rebota de frente. Aunque por momentos es más blanca, por largos ratos también es más brillante. Lo único diferente a la luz de cuatro de la tarde es que no adormece con brillos dorados las pupilas propicias a la dulzonería. La mía, por ejemplo. Aunque eso sí, la luz de las ocho de la mañana también cruza por olvidadas esquinas grises.

Candados, ventanillas y una marcha fúnebre
Engler García / 12 marzo, 2018
Aquella tarde de domingo yo estaba en la morgue de esta ciudad. Ahí también estaban algunos familiares de varias de las niñas muertas en el atroz incendio del Hogar Seguro. Esperaban que de alguna ventanilla alguien les entregara algún papel firmado y sellado para que pudieran irse con sus niñas ya sin vida.

La Plaza vive
Engler García / 19 abril, 2016
Un año después, el Palacio Nacional de la Cultura volvió a ser la tarima para manifestar contra la corrupción, los diputados, la crisis en salud, el sistema político y el partido FNC- Nación. “Somos una ciudadanía más consciente”, fue el grito constante de quienes participaron, con los tambores de La Batucada del Pueblo, de fondo.

Ellos, los que siempre han estado solos
Engler García / 3 febrero, 2016
Ya es un poco más de las diez de la noche. El muchacho taciturno se sienta en un banquito plástico y pide una cena de huevos duros. Se la sirven con arroz, frijol, un poco de guacamol y una cucharada de salsa rala de tomate. Las tortillas a medio calentar. Toda la comida a medio calentar. Es viernes y es una de las noches más frías de este año que recién comienza y al que ya se le terminó el primer mes, con el mismo saldo de toda la vida.

Los deseos que se pierden en el horizonte de la ciudad
Engler García / 14 diciembre, 2015
La calzada Atanasio Tzul siempre me ha parecido una especie de línea fronteriza. A un lado está la implacable Terminal, con sus antivirales gestos cotidianos de transacciones mediadas por la rudeza del escarnio de ser los últimos en la escala social. Aunque, en realidad, la calzada no divide nada. Quizá sólo sea una especie de muro imaginario que evita que todo aquello no se desborde.

¿Dónde te duele, madre?
Engler García / 26 noviembre, 2015
Tenía ratos de no pensar en mi madre. Es decir, en ella como mujer. Claro, siempre lo hago y doy vueltas alrededor de las mil postales que mi memoria-ficción ha generado. Pensar en mi madre me provoca muchos sentimientos. Entre la falta que me hace, la triste lástima, la pena y la incomprensión. ¿Por qué nunca te largaste de su lado, madre? Ella debió tener a mi hermano mayor recién entrada en sus veinte años. Habrá convivido con mi padre alrededor de quince años. Tal vez menos. La verdad nunca la sabré.
